-El presidente de Francia reitera la necesidad de trabajar unidos para frenar el cambio climático
-Destaca que los países industrializados tienen una responsabilidad particular que ejercer
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-Destaca que los países industrializados tienen una responsabilidad particular que ejercer
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Naciones Unidas-El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, afirmó hoy ante la cumbre de la ONU sobre cambio climático que "no existe otra alternativa que la acción común" para frenar el calentamiento del planeta y pidió "un impulso decisivo" para definir un marco multilateral que permita afrontar el reto con garantías.
"La división conduciría al fracaso", advirtió el jefe del Estado francés, quien se refirió a esta cumbre en la ONU como "una señal de política mayor", de la que la opinión pública está pendiente, porque espera que los responsables políticos adopten medidas concretas.
Sarkozy pronunció un discurso en el que reiteró la necesidad de trabajar unidos y de tener en cuenta que "los países industrializados tienen una responsabilidad particular que ejercer".
En este sentido, comprometió su voluntad y la de Francia en asumir "todo el esfuerzo que le corresponde" y para "suscitar las rupturas necesarias", de manera que la cuestión climática sea "un eje primordial de la acción exterior de mi país".
"Ya lo es también de la Unión Europea" (UE), destacó el mandatario francés, ante el convencimiento de que "no tenemos otra opción" que cambiar de política para revertir el problema.
"La inacción supondría aceptar un punto de no retorno, alcanzado cuando el calentamiento medio del planeta haya subido 2 grados Celsius en relación con la era pre-industrial", advirtió Sarkozy, quien añadió que "la inacción supondría aceptar una brutal disminución del PIB mundial, del orden del 5 al 20 por ciento por año".
Asimismo consideró que "el reto climático no está fuera de nuestro alcance" y que es necesario "actuar con voluntad", fijando metas concretas de reducción de gases contaminantes que "envíen una señal clara de esa voluntad de actuar".
"Una reducción del 50 por ciento de esas emisiones de aquí a 2050 es fundamental para alejar la amenaza que representa el punto de no retorno", subrayó el presidente francés, al referirse a lo que definió como "una exigencia colectiva (...) y de solidaridad".
La ONU representa, en su opinión, el "único marco eficaz y legítimo" para aportar una respuesta colectiva e internacional, que debe aunar tres ambiciones: lograr un crecimiento económico "limpio", proteger los bosques y adaptar a las poblaciones de los países más vulnerables a los efectos del cambio climático.
Sarkozy indicó que no se trata de una cuestión de falta de recursos, porque la inversión para propiciar un marco eficaz de lucha contra el cambio climático sería el equivalente al 1 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) mundial.
"La cuestión no es si somos o no capaces de financiar esas inversiones, sino de cómo financiarlas", argumentó el mandatario galo, partidario de que las emisiones contaminantes "tengan un precio, ya sea por medio del mercado o por la fiscalidad".
Esto quiere decir, por ejemplo, que se subasten parte de los créditos de emisión y que se facilite a las empresas contaminantes invertir en el desarrollo ecológico de los países en desarrollo.
No obstante, el presidente francés subrayó que "el mercado no puede constituir la única respuesta" a este desafío y que "la financiación pública es inevitable", de manera prioritaria en África y en los países más expuestos al cambio climático.
En última instancia, concluyó, es una cuestión de decidir qué tipo de futuro espera al planeta y de "clarividencia": "nadie puede imaginar dejar a sus hijos un mundo condenado, en el que sea imposible vivir". (Con información de EFE/MVC)
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El Financiero - México/25/09/2007
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