Por Nelson Bocanegra
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BOGOTA - El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, dijo el sábado que no permitirá a la mayor guerrilla del país reposicionarse políticamente usando un acuerdo humanitario como pretexto y llamó a las fuerzas de seguridad a intensificar la lucha contra el grupo rebelde.
Uribe acusó a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de utilizar los recientes espacios de diálogo con la mediación del presidente de Venezuela, Hugo Chávez y la comunidad internacional en busca del intercambio de plagiados por rebeldes presos, para fortalecerse políticamente.
"Estamos dispuestos a avanzar hacia el canje democrático por la liberación de nuestros secuestrados, pero no vamos a permitir que la guerrilla utilice la generosidad del Gobierno para reposicionarse en lo político cuando todos los días actúan como terroristas," dijo el mandatario en un acto de Gobierno.
El presidente Chávez tiene previsto reunirse en Venezuela el próximo 8 de octubre con un representante de las FARC, luego de que Uribe rechazó la idea del mandatario venezolano de encontrarse con el máximo líder de esa guerrilla, Manuel Marulanda, alias "Tiro Fijo," en territorio colombiano.
"Si nos quieren ayudar a que liberen nuestros secuestrados, estamos dispuestos, pero lo que no permitiremos es que la guerrilla siga buscando que cuando asesinan a Colombia, por fuera reciban el trato de personajes de la política, porque solamente hasta hoy son siniestros personajes del terrorismo," señaló Uribe desde la ciudad de Medellín.
Los acercamientos con las FARC, que incluyen el reciente encuentro de la senadora Piedad Córdoba con Raúl Reyes, otro jefe rebelde, buscan la liberación de un grupo de personas entre las que está la colombo francesa Ingrid Betancourt, tres estadounidenses, militares y policías, algunos de ellos plagiados desde hace casi una década.
INTENSIFICAR OPERATIVOS
Las FARC, conformadas por unos 17.000 combatientes, son la más grande fuerza rebelde que se enfrenta desde hace cuatro décadas con fuerzas de seguridad del Estado y paramilitares de ultraderecha, en un conflicto alimentado por dinero del narcotráfico.
Pero las FARC insisten en exigir la desmilitarización de una zona del tamaño de la ciudad de Nueva York para sostener las conversaciones que lleven al intercambio humanitario, a lo cual Uribe ha respondido negativamente, aduciendo que la guerrilla busca fortalecer su frentes.
En cambio, Uribe pidió a las fuerzas de seguridad intensificar las operaciones contra los insurgentes, así como para buscar el rescate de los secuestrados por la vía militar, a lo que se oponen los familiares.
"El gobierno sigue explorando opciones para la liberación de nuestros secuestrados sin renunciar al rescate, que ojalá en algún momento pudieran realizar las instituciones armadas de la república," dijo Uribe.
"Le pido hoy a las Fuerzas Militares y de policía y al ministro que intensifiquemos todas las operaciones," agregó el mandatario de 55 años, reelegido para un segundo periodo hasta el 2010.
Las declaraciones de Uribe se presentan a un mes de que en el país se realicen elecciones a alcaldías, gobernaciones y concejos regionales, en un ambiente enrarecido por las amenazas contra los postulados a esos cargos.
El sábado las autoridades reportaron la muerte de Julio César Marentes, candidato a la alcaldía del municipio de Villarica, en el departamento del Tolima, en un supuesto ataque de las FARC, en el que también resultó gravemente herido el candidato al concejo, Gonzalo Jiménez.
BOGOTA - El presidente de Colombia, Alvaro Uribe, dijo el sábado que no permitirá a la mayor guerrilla del país reposicionarse políticamente usando un acuerdo humanitario como pretexto y llamó a las fuerzas de seguridad a intensificar la lucha contra el grupo rebelde.
Uribe acusó a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de utilizar los recientes espacios de diálogo con la mediación del presidente de Venezuela, Hugo Chávez y la comunidad internacional en busca del intercambio de plagiados por rebeldes presos, para fortalecerse políticamente.
"Estamos dispuestos a avanzar hacia el canje democrático por la liberación de nuestros secuestrados, pero no vamos a permitir que la guerrilla utilice la generosidad del Gobierno para reposicionarse en lo político cuando todos los días actúan como terroristas," dijo el mandatario en un acto de Gobierno.
El presidente Chávez tiene previsto reunirse en Venezuela el próximo 8 de octubre con un representante de las FARC, luego de que Uribe rechazó la idea del mandatario venezolano de encontrarse con el máximo líder de esa guerrilla, Manuel Marulanda, alias "Tiro Fijo," en territorio colombiano.
"Si nos quieren ayudar a que liberen nuestros secuestrados, estamos dispuestos, pero lo que no permitiremos es que la guerrilla siga buscando que cuando asesinan a Colombia, por fuera reciban el trato de personajes de la política, porque solamente hasta hoy son siniestros personajes del terrorismo," señaló Uribe desde la ciudad de Medellín.
Los acercamientos con las FARC, que incluyen el reciente encuentro de la senadora Piedad Córdoba con Raúl Reyes, otro jefe rebelde, buscan la liberación de un grupo de personas entre las que está la colombo francesa Ingrid Betancourt, tres estadounidenses, militares y policías, algunos de ellos plagiados desde hace casi una década.
INTENSIFICAR OPERATIVOS
Las FARC, conformadas por unos 17.000 combatientes, son la más grande fuerza rebelde que se enfrenta desde hace cuatro décadas con fuerzas de seguridad del Estado y paramilitares de ultraderecha, en un conflicto alimentado por dinero del narcotráfico.
Pero las FARC insisten en exigir la desmilitarización de una zona del tamaño de la ciudad de Nueva York para sostener las conversaciones que lleven al intercambio humanitario, a lo cual Uribe ha respondido negativamente, aduciendo que la guerrilla busca fortalecer su frentes.
En cambio, Uribe pidió a las fuerzas de seguridad intensificar las operaciones contra los insurgentes, así como para buscar el rescate de los secuestrados por la vía militar, a lo que se oponen los familiares.
"El gobierno sigue explorando opciones para la liberación de nuestros secuestrados sin renunciar al rescate, que ojalá en algún momento pudieran realizar las instituciones armadas de la república," dijo Uribe.
"Le pido hoy a las Fuerzas Militares y de policía y al ministro que intensifiquemos todas las operaciones," agregó el mandatario de 55 años, reelegido para un segundo periodo hasta el 2010.
Las declaraciones de Uribe se presentan a un mes de que en el país se realicen elecciones a alcaldías, gobernaciones y concejos regionales, en un ambiente enrarecido por las amenazas contra los postulados a esos cargos.
El sábado las autoridades reportaron la muerte de Julio César Marentes, candidato a la alcaldía del municipio de Villarica, en el departamento del Tolima, en un supuesto ataque de las FARC, en el que también resultó gravemente herido el candidato al concejo, Gonzalo Jiménez.
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Reuters América Latina - UK/23/09/2007
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