Washington, 5 oct (PL) El liderazgo demócrata del Congreso anunció que redoblaría desde hoy los esfuerzos para congelar el financiamiento de las guerras del Pentágono, en medio de un descontento generalizado con la política antiterrorista de la administración.
Los opositores del presidente George W. Bush dicen estar listos para emprender acciones sostenidas en el Congreso con la meta de redefinir el presupuesto bélico de la Casa Blanca, que busca 190 mil millones de dólares adicionales.
Según el mandatario republicano, el plan de gastos propuesto es necesario para consolidar el funcionamiento del ejército norteamericano en Iraq y Afganistán durante el nuevo año fiscal, que empezó justo con el presente mes.
Los demócratas, liderados por el senador Harry Reid, discrepan sobre la real urgencia de ese volumen y proponen dejar el monto en el rango de 40 o 50 mil millones de dólares, precisaron fuentes parlamentarias.
En caso de no lograrse una fórmula de compromiso entre ambos poderes, el jefe del Comité de Apropiaciones de la cámara baja, David Obey, prevé bloquear la demanda de la rama ejecutiva y exigir una política austera al Pentágono.
El costo de la agresión estadounidense a Iraq, en muertes y capitales, despuntó hasta niveles impredecibles, sobrepasó 10 veces cálculos iniciales y se aproxima al gasto de las campañas de Vietnam y la I Guerra Mundial.
Los más recientes cálculos sugieren una factura que excede 500 mil millones de dólares, y los expertos no pueden vaticinar hasta donde llegará la despensa de dinero para financiar las contiendas en el Medio Oriente.
Según McClatchy Newspapers, tal patrimonio podría garantizar los estudios universitarios de ocho millones de adolescentes norteamericanos y la matrícula preescolar de todos los niños de tres años del país hasta 2015.
Además, el mismo inventario financiero facilitaría una gran mejora en la asistencia social para al menos la mitad de los 35 millones de estadounidenses mayores de 65 años.
Los opositores del presidente George W. Bush dicen estar listos para emprender acciones sostenidas en el Congreso con la meta de redefinir el presupuesto bélico de la Casa Blanca, que busca 190 mil millones de dólares adicionales.
Según el mandatario republicano, el plan de gastos propuesto es necesario para consolidar el funcionamiento del ejército norteamericano en Iraq y Afganistán durante el nuevo año fiscal, que empezó justo con el presente mes.
Los demócratas, liderados por el senador Harry Reid, discrepan sobre la real urgencia de ese volumen y proponen dejar el monto en el rango de 40 o 50 mil millones de dólares, precisaron fuentes parlamentarias.
En caso de no lograrse una fórmula de compromiso entre ambos poderes, el jefe del Comité de Apropiaciones de la cámara baja, David Obey, prevé bloquear la demanda de la rama ejecutiva y exigir una política austera al Pentágono.
El costo de la agresión estadounidense a Iraq, en muertes y capitales, despuntó hasta niveles impredecibles, sobrepasó 10 veces cálculos iniciales y se aproxima al gasto de las campañas de Vietnam y la I Guerra Mundial.
Los más recientes cálculos sugieren una factura que excede 500 mil millones de dólares, y los expertos no pueden vaticinar hasta donde llegará la despensa de dinero para financiar las contiendas en el Medio Oriente.
Según McClatchy Newspapers, tal patrimonio podría garantizar los estudios universitarios de ocho millones de adolescentes norteamericanos y la matrícula preescolar de todos los niños de tres años del país hasta 2015.
Además, el mismo inventario financiero facilitaría una gran mejora en la asistencia social para al menos la mitad de los 35 millones de estadounidenses mayores de 65 años.
-
NOTICIAS PRINCIPALES
Prensa Latina - Cuba/05/10/2007
No hay comentarios:
Publicar un comentario