Londres - Gran Bretaña/Rasul Mohedian, embajador de Irán en Londres, ha desmentido hoy lunes las declaraciones proferidas por Kim Howells, subsecretario de Relaciones Exteriores para el Medio Oriente, y ha invitado a las autoridades británicas a resolver pacíficamente los problemas de la región.
En un artículo publicado hoy lunes en el periódico en árabe Sharq Al Awsat, que se edita en Londres, Mohedian replicó a las declaraciones proferidas en este mismo rotativo el pasado viernes por dicha autoridad británica, diciendo: “Es sorprendente que una autoridad inglesa se inmiscuya de manera flagrante y en un tono indigno y nada diplomático en los asuntos internos de un país independiente como Irán.” Howells afirmó el viernes pasado en este mismo diario que Irán supone una amenaza para toda la región.
Tras descalificar semejantes afirmaciones, Mohedian apuntó: “Estos puntos de vista se ponen sobre el tapete para dañar la imagen de Irán.” El embajador iraní no pasó por alto el hecho de que Howells hubiese elegido un periódico que se edita en árabe para hacer público este desatino, y sostuvo: “Nuestro mensaje es claro; los utensilios oxidados de la política de ‘divide y gobernarás’ no son eficaces, al menos cuando lo que se pretende es intimidar al gran pueblo iraní.” Mohedian tachó asimismo de “propagandísticas” las declaraciones de Howells, que no han tenido otro propósito que el de “poner a la opinión pública árabe en contra de los iraníes.” En su artículo, al que tituló “Lenguaje para el diálogo o la intromisión”, Mohedian consideró “lágrimas de cocodrilo” las declaraciones de Howells en su artículo, basándose para tal descalificación en los desmanes británicos cometidos en Irán, como el golpe de estado perpetrado contra el primer ministro electo, Mohammad Mosaddeq, en 1953, el apoyo de los occidentales al dictador iraquí Sadam Hosein cuando éste atacó Irán, la vista gorda de estos mismos países cuando este mismo dictador utilizó armamento químico contra la población civil y militar de Irán, y una larga ristra de acusaciones que omitió.
A continuación, Mohedian abordó temas más actuales, y aludió a las acusaciones que Howells vertió sobre Teherán a cuenta de su programa nuclear, y replicó: “Irán es firmante del Tratado de No Proliferación de armas nucleares y, como tal, tiene un derecho inalienable a explotar con fines pacíficos la energía atómica.” “A pesar de esto —prosiguió— Irán se las está viendo con un escándalo sin precedentes por su programa atómico, mientras que Israel, que es una potencia nuclear que a nadie responde, goza del apoyo total de las grandes potencias para ponerse encima de los países árabes.”
En un artículo publicado hoy lunes en el periódico en árabe Sharq Al Awsat, que se edita en Londres, Mohedian replicó a las declaraciones proferidas en este mismo rotativo el pasado viernes por dicha autoridad británica, diciendo: “Es sorprendente que una autoridad inglesa se inmiscuya de manera flagrante y en un tono indigno y nada diplomático en los asuntos internos de un país independiente como Irán.” Howells afirmó el viernes pasado en este mismo diario que Irán supone una amenaza para toda la región.
Tras descalificar semejantes afirmaciones, Mohedian apuntó: “Estos puntos de vista se ponen sobre el tapete para dañar la imagen de Irán.” El embajador iraní no pasó por alto el hecho de que Howells hubiese elegido un periódico que se edita en árabe para hacer público este desatino, y sostuvo: “Nuestro mensaje es claro; los utensilios oxidados de la política de ‘divide y gobernarás’ no son eficaces, al menos cuando lo que se pretende es intimidar al gran pueblo iraní.” Mohedian tachó asimismo de “propagandísticas” las declaraciones de Howells, que no han tenido otro propósito que el de “poner a la opinión pública árabe en contra de los iraníes.” En su artículo, al que tituló “Lenguaje para el diálogo o la intromisión”, Mohedian consideró “lágrimas de cocodrilo” las declaraciones de Howells en su artículo, basándose para tal descalificación en los desmanes británicos cometidos en Irán, como el golpe de estado perpetrado contra el primer ministro electo, Mohammad Mosaddeq, en 1953, el apoyo de los occidentales al dictador iraquí Sadam Hosein cuando éste atacó Irán, la vista gorda de estos mismos países cuando este mismo dictador utilizó armamento químico contra la población civil y militar de Irán, y una larga ristra de acusaciones que omitió.
A continuación, Mohedian abordó temas más actuales, y aludió a las acusaciones que Howells vertió sobre Teherán a cuenta de su programa nuclear, y replicó: “Irán es firmante del Tratado de No Proliferación de armas nucleares y, como tal, tiene un derecho inalienable a explotar con fines pacíficos la energía atómica.” “A pesar de esto —prosiguió— Irán se las está viendo con un escándalo sin precedentes por su programa atómico, mientras que Israel, que es una potencia nuclear que a nadie responde, goza del apoyo total de las grandes potencias para ponerse encima de los países árabes.”
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IRNA - Iran/08/10/2007
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