Es notable que la gran oposición al gobierno de Chávez parta de los sectores estudiantiles que rechazan las reformas y reivindican la democracia en libertad.
En los movimientos políticos y sociales en Venezuela y que están haciendo frente a los planes del presidente Hugo Chávez Frías, se destacan más que organizaciones políticas opositoras, los movimientos juveniles, conformados por universitarios y estudiantes de secundaria.Las marchas de miles de estudiantes son una constante desde que el gobierno de Chávez, o mejor dicho, Chávez mismo ha propugnado una reforma constitucional a un Legislativo copado totalmente por el oficialismo. Lo jóvenes rechazan la reelección indefinida de Chávez, el voto a los 16 años, cambios en la división territorial del país y el modelo de Estado socialista propuesto. Rechazan también que las escuelas y colegios privados se sujeten a un programa de estudios único auspiciado por el Estado, en los cuales prevalece el adoctrinamiento socialista, como una de las metas principales del nuevo sistema educativo venezolano.Los estudiantes han gritado hace pocos días en Caracas, ¡reforma no, democracia sí! y han revindicado su derecho a protestar y a pedir que la consulta sobre la reforma constitucional sea el 3 de febrero, para que haya tiempo de conocerla y no como quiere Chávez aprobarla de inmediato y lanzarla a referéndum el 2 de diciembre.Es notable el movimiento estudiantil en Venezuela como factor de oposición que se enfrenta a grupos organizados del oficialismo y a las milicias ciudadanas bolivarianas. Hay quienes sostienen que los estudiantes representan a un grupo social que ha nacido en la democracia y que defendería al extremo esa forma de vida política y social reivindicando las libertades ciudadanas.
En los movimientos políticos y sociales en Venezuela y que están haciendo frente a los planes del presidente Hugo Chávez Frías, se destacan más que organizaciones políticas opositoras, los movimientos juveniles, conformados por universitarios y estudiantes de secundaria.Las marchas de miles de estudiantes son una constante desde que el gobierno de Chávez, o mejor dicho, Chávez mismo ha propugnado una reforma constitucional a un Legislativo copado totalmente por el oficialismo. Lo jóvenes rechazan la reelección indefinida de Chávez, el voto a los 16 años, cambios en la división territorial del país y el modelo de Estado socialista propuesto. Rechazan también que las escuelas y colegios privados se sujeten a un programa de estudios único auspiciado por el Estado, en los cuales prevalece el adoctrinamiento socialista, como una de las metas principales del nuevo sistema educativo venezolano.Los estudiantes han gritado hace pocos días en Caracas, ¡reforma no, democracia sí! y han revindicado su derecho a protestar y a pedir que la consulta sobre la reforma constitucional sea el 3 de febrero, para que haya tiempo de conocerla y no como quiere Chávez aprobarla de inmediato y lanzarla a referéndum el 2 de diciembre.Es notable el movimiento estudiantil en Venezuela como factor de oposición que se enfrenta a grupos organizados del oficialismo y a las milicias ciudadanas bolivarianas. Hay quienes sostienen que los estudiantes representan a un grupo social que ha nacido en la democracia y que defendería al extremo esa forma de vida política y social reivindicando las libertades ciudadanas.
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Opinión Bolivia - Bolivia/29/10/2007
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