Creen que la mujer mató a sus 3 bebés para ocultar que fue infiel

HORROR EN WENDEN, DONDE HALLARON A LOS RECIEN NACIDOS EN UN FREEZER
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Es una sospecha que tienen los investigadores. Por eso están realizando pruebas de ADN. Ya se pudo confirmar que los bebés eran tres nenas y que habían nacido vivas. La mujer, de 44 años, sigue detenida.

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Por: Idafe Martín

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Un barrio elegante, una casa importante, cuidada, como las de los vecinos que ahora miran con curiosidad a decenas de periodistas y varios móviles de tevé que hacen guardia frente al lugar. Todo era idílico hasta que en un freezer del sótano de esa casa hallaron tres nenas recién nacidas. Möllmicke, un barrio de Wenden, un pueblo de 20.000 habitantes en el estado de Renania-Westfalia (oeste de Alemania), se despertó el lunes con esa sorpresa macabra y ahora es noticia.Aquí, una mujer de 44 años, quedó embarazada tres veces, tuvo a los bebés y se "deshizo" de ellos metiéndolos en ese freezer. El hijo de 18 años de ese matrimonio, formado por una ama de casa y un electricista buscaba el sábado algo para almorzar. Sus padres estaban de viaje. En el freezer del sótano, donde esperaba encontrar una pizza, se topó con los cadáveres de tres recién nacidos. Uno estaba envuelto en un diario de 1988.Avisó a sus dos hermanos, de 22 y 24 años. Al día siguiente, cuando llegaron sus padres, la mayor los convenció y los llevó a la Policía. Allí la madre confesó que había parido a esas nenas, pero que por su obesidad su marido no se había percatado de los embarazos. La mujer quedó detenida y la Policía todavía busca pruebas en la casa.Ayer, la señora Reinhardt, que vive a 100 metros de la casa del horror, aceptó hablar con Clarín "porque no hay nada que esconder". Y dijo: "esa señora era una enferma mental y ahora lo supimos; porque parecía normal, nunca fue muy alegre pero jamás hubiera imaginado algo así". "Ahora, lo que más pena me da es ese marido que descubrió que dormía con una loca y esos niños, todos jóvenes", afirmó. Y concluyó: "esta mujer era tan cuidadosa, tenía la casa siempre tan arreglada...".Pero en Wenden hay otras versiones. En la cola del supermercado más cercano a la casa, una joven contó: "lo hizo porque las nenas eran de otro hombre". Unos ríen, pero una señora le pide a la joven silencio.Pero el rumor no parece ser sólo eso. Los investigadores tienen fuertes sospechas de que las bebés fueron concebidas en relaciones extramatrimoniales. Un policía reconoce más tarde que están haciendo pruebas de ADN para verificar si las nenas son hijas del marido de la acusada, un electricista de 47 años.Un vocero de la Fiscalía de Siegen, encargada de la investigación, explicó ante la casa que esperaban tener los resultados de las autopsias para determinar las causas de la muerte de los bebés, pero ya se confirmó que eran nenas y que nacieron vivas. Para hacer la autopsia los forenses necesitan que los cuerpos estén totalmente descongelados.La Policía también explicó que la mujer había confesado su responsabilidad y que estaba en tratamiento psiquiátrico. Y que su crimen podría quedar impune porque el delito de homicidio en Alemania prescribe a los 20 años y los cuerpos podrían llevar ya ese tiempo en el freezer. Además, la Policía -según el semanario Der Spiegel, está investigando al entorno familiar y a los vecinos para saber si nadie se dio cuenta entonces de aquellos embarazos.Pero en el pueblo se nota que el tema tuvo alto impacto. Ante la iglesia de San Severino se reúnen las madres y abuelas que esperan para recoger a sus chicos que salen de la escuela. Las señoras (que preguntan "¿para qué quiere usted mi nombre?") dicen que esperan que este caso no los convierta en un nuevo Amstetten, el pueblo austríaco donde un hombre encerró a su hija durante 24 años, la violó y procreó con ella siete hijos. "Ahora lo peor es explicarle a los chicos", dice una madre joven. Y agrega: "El mío tiene 5 años y no se entera mucho, pero mi sobrino de 10 pregunta y la verdad, no es fácil explicarles algo así".Estas mujeres creen que los rumores sobre la paternidad de las nenas son infundados. "Ahora todos se meterán con ella porque está loca y no se puede defender, pero yo no creo esas cosas", dice otra mujer, que se pregunta qué actitud tendrán los vecinos si la supuesta homicida es declarada inocente o prescritos los delitos y vuelve al pueblo.Lo que todas tienen claro es que la tranquilidad del pueblo apenas fue alterada. "Han llegado muchos periodistas -cuenta más tarde el empleado del Café Junge, en la Parkplatz- y en la televisión estamos apareciendo por una mala noticia, pero no es la primera vez que esto pasa en Alemania, así que se olvidará rápido", concluye.En el Ayuntamiento no quieren comentar nada sobre el drama. La respuesta, educada, es a la vez tajante: "la Fiscalía lleva el caso, ellos irán informando".

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Un trágico historial
Alemania tiene un trágico historial de infanticidios cometidos por madres. Sabine H. fue condenada hace un mes a 15 años de cárcel. Descubrieron que había matado a sus 9 hijos apenas nacían. Los enterraba en macetas y tachos para desperdicios. Y una mujer de Erfurt reconoció en 2007 que metió a sus dos recién nacidos en la basura porque dificultaban su "desarrollo profesional". En Plauen se descubrió a otra madre que mató a sus tres hijos recién nacidos. A uno lo puso en una valija, a otro lo metió en el congelador y al tercero lo dejó, muerto, en el balcón.Estos casos fueron en la parte oriental de Alemania y en familias de clase baja. Ahora es una familia acomodada con una gran casa en un hermoso vecindario de un pueblo próspero en una de las regiones más ricas de Alemania. En algunos hospitales hay un servicio donde se puede dejar sin preguntas a recién nacidos. Hace 20 años ese servicio no existía.

WENDEN. ENVIADO ESPECIAL

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Clarin.com - Argentina/07/05/2008