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El fundamentalismo cristiano
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Vosotros llegáis de una manera u otra a los forum ateístas haciendo sermones sobre el fuego del infierno, azufre y las iras del hacedor divino, pero por otro lado gustáis decir que estáis siendo “perseguidos” cuando los ateos se ríen por esos absurdos que llegáis a imponer a vuestros seguidores.

Vosotros amenazáis a los no creyentes diciéndonos que algo que no existe nos va a mandar para un lugar que tampoco existe. Es pues que confirmáis rotundamente que los ateos irán todos a los infiernos, y confirmado hace poco por el actual jefe infalible del Vaticano, pero que nunca ha sido probada su existencia. Aún así, vosotros no aguantáis la cólera cuando los ateos testifican históricamente las violencias cometidas por el cristianismo a empezar por el catolicismo el cual lo viene practicando hace más tiempo que el protestantismo.

Quedáis profundamente ofendido cuando los libre pensadores critican o “ofenden” a vuestro Dios, mismo que se esté atacando una idea, no una supuesta divinidad propiamente dicha y que nadie ha visto nuca jamás.

Creéis que obligatoriamente todos deberíamos estar sometidos a las leyes del cristianismo, sin embargo, vosotros quedáis ofendidos cuando los ateos testifican por medio de la geología que los humanos son animales evolucionados y están sujetos a las leyes de la Naturaleza.

Pensáis que todas las personas que no son cristianas son por tanto ateas. Es por lo que creéis que el pensamiento ateísta as una religión más. ¡Totalmente equivocados!

Cuando vosotros escucháis algo relacionados con otras religiones, deberíais preguntaros: ¿Como encaja los personajes de Dios Padre, Jesús y el Espíritu Santo en ellas?

Quedáis sorprendidos cuando los ateos comentan que tienen parientes y amigos cristianos.

Vosotros ignoráis lo que constan en los cacareados libros sagrados sobre la humildad por lo que no juzgáis a las personas. Ahí acostumbráis a usar palabras como “mundanos”, “sin dios”, “infieles”, “herejes”, etc., siempre en el sentido peyorativo.

Vosotros acatáis la Biblia y evangelios aleatoriamente, como si esos libros probasen alguna cosa importante además de que son unos grandes mamotretos. Pero aún vosotros insensatamente los citáis como si los ateos nuca los hubiésemos leído para así llegar a unos resultados concluyentes.

Consideráis des respetuoso cuando los ateos comentan que Jesús está muerto hace dos mil años… Pero vosotros no ven ningún problema en plastificarlo en yeso, madera, bronce, hierro, etc., la imagen de un cuerpo semidesnudo torturado y ensangrentado de ese personaje en un símbolo de ejecución pagano-romano al que adoráis aún como un supremo salvador.

Vosotros predicáis por todo el mundo para que seamos gratos y felices por lo que tenemos, (aún a aquellos que viven en las miserias), sin embargo, estáis ansiosamente a la espera de una gran recompensa celestial por toda la eternidad posterior a la muerte.

Creéis ciegamente que unos poemas e historias fantásticas escrita, hace miles de años por tribus nómadas bajo el sol del desierto deben ser interpretadas como verdades eternas.
A pesar de que en realidad todas las culturas del pasado han tenido sus propias teorías sobre la creación del mundo, vosotros imponéis esa inventada por los semitas que son exclusivas y la única verdadera. Y que un personaje representado como un viejito con cara de no muy buen amigo, creó a todos los millones de especies de animales en unos días, pero no aquellos que solamente fue descubierto recientemente y conocidos como de eras geológicas, porque no constan en ese génesis. Es por lo que creéis que si la evolución pudiese ser considerada falsa, entonces el cristianismo y su “diseño inteligente” tomaría el tan deseado relevo.

Mismo que hoy sabemos que la Tierra es un planeta común entre los que pudiese haber como ella, girando en torno de una pequeña y común estrella, en un típico sistema solar, en la periferia de una galaxia espiral común, vosotros creéis aún que ella es el centro del universo.

Continuáis insistiendo en negar la teoría de la evolución pertinazmente en pro de vuestros dogmas, pero así mismo vosotros no queréis saber nada en abandonar los frutos que han aportado las ciencias como el coche, los ordenadores, antibióticos, cirugías de prótesis, etc.

Vosotros creéis que una deidad estúpida y colérica como es el dios único judío-cristiano es capaz de crear un universo.

Continuáis insistiendo que la evolución es “altamente imposible”, pero estáis totalmente seguros y convencidos en creer que el personaje de Jesús nació de una virgen, tenía poderes sobrenaturales (que no les sirvieron para evitar su asesinato), resucitó de entre los muertos y subió volando para su imaginario paraíso sin usar vehículo espacial.

Cuando encontráis un simple error en las explicaciones de la evolución, os sirve de motivo para gritar a los cuatro vientos que ella está errada; sin embargo, cuando los ateos demuestran los miles de errores del dúo bíblico-evangélico, os cabreáis diciendo que estamos sin fe y así actuamos.

Acusáis a la evolución de que es “racista”, pero os apegáis a un libro repleto de mensajes de etnocentrismo y supremacías raciales.

Alegáis que el Darwinismo llevó a las condiciones más propias sobre la reproducción de la raza humana a los abusos, pero vosotros pertinazmente defendéis pasajes bíblicos donde el pueblo de dios exterminó miembros inocentes de otras razas.

Vosotros citáis versos de Isaías en los que implican que la Tierra es plana, que Jo decía que el cielo es sólido, pero a eso hoy no les dais importancia que pareceríais estúpidos ante el cosmos y geografía, que por otro lado es la mismo desde aquellos gloriosos tiempos.

Pero aún es peor cuando citáis los “hechos” del Génesis en que describe la creación en 6 días cual literalmente dais por cierto y sin remedio ahí sí parecéis auténticos estúpidos en pleno siglo XXI.
Juzgáis a toda la Humanidad por las cosas malas que han hecho y llegan a hacer para justificar “los pecados” a empezar por “el original”; no en tanto quedáis ofendidos cuando los ateos, o cualesquiera otras personas con sentido de la razón, juzgan a los cristianos por las cruzadas, inquisiciones, guerras religiosas y un largo etc.

Vosotros constantemente os estáis refiriendo a los argumentos teológicos, ontológicos e cosmológicos, mismo que las infinidades de esos absurdos conceptos hoy son positivamente totalmente conocidos.
Quedáis profundamente ofendidos cuando los ateos dicen que la biblia es mitología comparándola con la Ilíada, Odisea, los propios evangelios, etc.

Vosotros no sois capaces de diferenciar la similitud entre argumentos “ad ignorantum” para la prueba de dios, y un argumento “ad ignorantum” para la prueba de duendes, apariciones, unicornios rojos, dragones, etc.

Continuáis insistiendo hasta la saciedad de que ese vuestro dios es omnipresente, pero las personas tienen que ir a las iglesias para “hablar” con él; de que no es posible el afatarse con lo cual “os perderíais” y que la palabra de él está contenida en las “sagradas escrituras”.

Alegáis que dios es un ser personal y que tiene cualidades humanas, pero ignoráis que esas cualidades humanas les imponen limitaciones a él mismo.

Vosotros os gusta ver las cosas en blanco y negro; que una acción está correcta o errada; que una idea o es verdadera o salva; o que una religión es correcta o incorrecta.

Como portadores que sois de vuestro dios, manifestáis que sus interpretaciones son correctas, pero cuando acorralados por la cantidad de incoherencias que llegáis a decir, entonces rectificáis de qué dios está por encima de la comprensión humana.

Creéis ciegamente, que el cristianismo católico tiene el monopolio de la verdad, la moralidad y en cualquier asunto que sea pertinaz en la espiritualidad, sin olvidar las cuestiones mundanas. Esto para vosotros os lleva a que sin dios no habría ninguna base para la moralidad.

Vosotros apuntáis con intenciones triunfalistas las lagunas del conocimiento científico moderno diciendo que éste no tiene todas las respuestas. Pero siempre que necesitáis explicar algún hecho natural que os conviene, levantáis las manos hacía el “cielo” diciendo: “ha sido dios el que lo ha hecho o querido”.

Consideráis una blasfemia la idea de que el personaje de Jesús se hubiese casado y hubiese tenido hijos, cosa natural y normal en la tradición judaica y otras. Pero el quid de la cuestión es que no podéis tener un dios preñando a una mujer y engendrando descendientes…

Por norma vosotros podéis perfectamente ignorar cualquier pasaje del denominado antiguo testamento, excepto aquellos en que habláis de tonterías como “pecado original”, “diez mandamientos” y leyes hebreas a cerca del homosexualismo, sin olvidar las divulgadas por el Vaticano.

Es un hecho en que afirmáis que la doctrina de la trinidad consta y está basada en la Biblia, mismo que el judaísmo no lo reconoce para nada.

Creéis que los sueños alucinógenos de algunos “iluminados” sobre algo que pudo haber ocurrido es una previsión de que llegará el fin del mundo y la venida de Cristo.

Testimoniáis que ese dios que quebranta sus propias leyes debe practicar el favoritismo, pues resulta que él muda de ideas y que actúa basándose en satisfacciones emocionales, pero así mismo es “de moralidad objetiva”.

Siguiendo cada uno de los cuatro parágrafos en que se divide esos machacones textos sagrados vosotros creéis que una deidad como la vuestra que aplica puniciones eternas para pecados eternos y crímenes cometidos hasta por el pensamiento, que castiga a personas por los pecados de otras, que usa la pena de muerte para prácticamente para todos, ¿creéis que es “objetivamente justo”?

Señores cristianos-católicos-protestantes, ¿creéis que ese sagrado libro de la Biblia, que defiende la poligamia, esclavitud sexual, incestos, estupor, abuso en la mujer, etc., debería ser un modelo para “para los valores familiares” y de “moralidad sexual”?

Aún defendéis los actos de violencia bíblica testificando que fue en legítima defensa, pero ahí consta claramente que fueron los israelitas quienes atacaron primeramente y masacraron pueblos enteros que eran pacíficos.

En esa historia relacionada con las plagas de Egipto, la esclavitud de los israelitas las estáis defendiendo, lo mismo que éstos practicaban sus propias formas de esclavitud y crueles guerras.

Defendéis ese polémico libro mismo que nunca tuvo la pretensión de ser histórico, e igualmente de que debería ser científico, por lo que ha demostrado que no ha sido nada de eso mismo que ahora queráis insistir.

Enfocáis la manera en que el pretendido Jesús murió diciendo que eso es lo más importante del mundo, pues lo hizo por vuestros pecados (nunca los nuestros), que por otro lado aún no habíais nacido.

Lleváis a gala de que no hay ninguna contradicción en la biblia, salvo algunos pequeños errores de copistas y traductores… ¿Solamente algunos pequeños errores…? ¿Y que así mismo creéis que “dios es amor” por qué así lo dice sus copistas y traductores?

Tenéis la desfachatez de culpar al otro dios o personaje de Satanás por todo lo que de malo hay en la Biblia y fuera de ella (como ahora también en la actualidad), a sabiendas que fue el propio Jehová quien, primeramente lo creó, y a continuación practicó el 99,99% de las maldades y calamidades que constan en ese sanguinario testamento.

Pensáis que por qué Hitler parecía que no era cristiano eso significa que el cristianismo no tuvo papel activo en aquellos horrendos asesinatos. Pasáis por alto de que el autor de la “Solución Final”, Heinrich Hinamber era católico; que la Alemania nazi era predominantemente cristiana, tenía sustancioso concordato con el Vaticano, etc. Y aún recordaros, ya que nos ha tocado vivir gran parte del siglo XX, que Francisco Franco, “por la gracia de Dios”, mató, de una manera u otra, a miles de ciudadanos con su Nacional Catolicismo y consiguió su victoria con la ayuda, principalmente, de la iglesia católica, Mussolini, Hitler, la banca…

Insistimos, vosotros olvidáis que los dos cacareados libros que sustentan el cristianismo han servido como justificante del terrorismo y la esclavitud. Aún tenéis la desvergüenza de reivindicar y ser “pro-vida”, pero no os manifestáis contra la pena de muerte, la destrucción ambiental, las guerras actuales, preventivas y todas aquellas contra naciones que no amenazan a nadie.

Os oponéis vehementemente a la eutanasia, mismo cuando el enfermo ya está desahuciado de todo el colegio médico; pero si os convertís aún más en banderas bíblicas si el moribundo pasa a ser un personaje mundial y propagandístico.

Creéis que los asuntos más importantes del momento no son las guerras, hambrunas, enfermedades, etc., y sí los casamientos gays, abortos terapéuticos, investigaciones con células madre, etc. Sin embargo, trivializáis los holocaustos, guerras de toda índole, etc., comparándolos con los abortos, pero olvidáis que esas desgracias contra la humanidad provienen de la Biblia donde constan como mandatos del divino Jehová.

Confirmáis categóricamente que la personalidad humana comienza con la concepción, mismo que no haya aún ninguna base científica y mucho menos teogónicas para desarrollar esas opiniones. Aún estáis en contra de los medios anticonceptivos, mismo que estos puedan acabar con las deformaciones de los fetos o las muertes de las madres.

Como todos sois del mismo tronco del que fue hecha la cruz, en el caso protestante aplauden al papa católico cuando éste en un acto de “humildad cristiana” condena el aborto, investigaciones científicas de cualquier índole, unión del mismo sexo, etc. Y llegáis al colmo de la estupidez diciendo que la evolución darwiniana es apenas una teoría, confirmando por supuesto, por el Génesis.

Podríamos llamarlo de anecdótico, pero no lo es, al reivindicar que la América Latina fue fundada sobre los “valores cristianos”. Sí, eso sí, pero contando con las guerras de conquistas, destrucciones culturales, conversiones forzosas de pueblos indígenas, esclavitud, discriminaciones raciales y sociales, implantación de la santa inquisición, etc. En ese punto puede que tengáis razón en estos hechos citados si así los consideráis como “valores cristianos”.

Todos los políticos que usan consignas cristianas (al igual que aquellos otros que no la usan), son capaces de engañar, independientemente de las deshonestidades y motivos que ellos estén ya practicando.
Se os llena la boca al decir que jamás llegareis a votar en un candidato que no fuese cristiano. Es como decir que vuestro dios va a prohibir a un ateo acceder a la política.

Para vosotros “los 10 mandamientos” deberían ser las bases fundamentales de las leyes morales y civiles en toda la civilización, a sabiendas que ellos fueron impuestos durante siglos y no han servido para nada.
Hacéis las obras de caridad basadas en la fe, pero con la intención de ganar un pasaje garantizado para la “vida eterna”.

Deseáis ver más gentes religiosas en las políticas, mismo que verdaderamente hubiese la separación del estado y la iglesia, pero con la “gracia” de que estos alcanzasen puestos claves para tener grandes influencias en las administraciones públicas del mundo.

Pensáis que los únicos terroristas son los fanáticos islamistas y que no existió ni existe en el cristianismo, pero resulta que al igual que en tiempos pretéritos, ayer mismo y hoy, de una u otra manera continuáis instrumentando las inquisiciones, caza de brujas (actuales científicos), cruzadas de toda índole, etc., encubiertas con las cacareadas democracias, los viajes pagados por los pueblos del dictador vaticanista…

Para finalizar, pues esto se extendería hasta llegar al “reino de los cielos”, vosotros citáis la Segunda Ley de la Termodinámica para tratar de probar que la evolución es imposible, pero no sois capaces de definir correctamente los significados de la “entropía”, es decir, la medida de cuantidad de desorden de un sistema… Y por supuesto, sobre químicas, medicinas, cirugías, prótesis de toda índole…, pues cabe recordar que un cerebro y dos manos trabajando juntos hacen mucho más que millones de cerebros y manos rezando y dando alabanzas a los cuatro vientos…
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LQSomos. Zerimar Ilosit. Julio de 2008
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