"El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, se ha visto en la necesidad de “marcar diferencias” entre el presidente de Colombia Álvaro Uribe y su ministro de Defensa Juan Manuel Santos, algo totalmente inaudito. Es como si alguien pretendiese salvar a Bush, atribuyendo la política internacional de los Estados Unidos a Condoleezza Rice, o la invasión de Iraq a Colin Powell. Mientras Uribe gana una enorme batalla mediática, consolida su posición política internacional, y se libra del grave conflicto interno con el Tribunal Supremo por su fraudulenta elección presidencial y sus “conexiones” germinales y permanentes con el paramilitarismo; su ministro de defensa reproduce la acusación de las oligarquías colombiana y venezolana, y de los EEUU contra la revolución bolivariana. El intento de Chávez de preparar unas relaciones menos tensas entre Caracas y Washington para una etapa posterior a las elecciones presidenciales en el mal vecino del Norte, parece quebrarse irremediablemente(...)". Artículo completo, noticia vinculada y vídeos en:
-inSurGente/15/07/2008
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