BURGOS - ESPAñA
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, señaló que todos los indicios apuntan a la organización armada vasca ETA como autora del atentado. La fachada del edificio fue lo más dañado por la explosión y se instaló un hospital de campaña en las inmediaciones para atender a los heridos.
La mayoría de las víctimas padeció heridas leves producidas por los vidrios.
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"Ha sido un vehículo bomba" que estalló "sobre las 04H00" locales (02H00 GMT), declaró un portavoz de la subdelegación del gobierno central en Burgos.
La explosión contra la casa cuartel, donde viven los agentes con sus familias, causó 46 heridos leves, de ellos seis niños, indicaron a la AFP fuentes de la Guardia Civil. Dos de ellos fueron ingresados en un hospital y se encuentran en observación.
El delegado del gobierno español en la región de Castilla y León, Miguel Alejo, declaró a Radio Nacional de España (RNE), que "no ha habido aviso previo", como suele hacer ETA antes de perpetrar atentados para permitir la evacuación del lugar. Según Alejo, "hay restos que parecen ser de una furgoneta" que habría sido utilizada como vehículo bomba.
La fachada del edificio fue lo más dañado por la explosión y el ataque abrió un cráter en el suelo. Un hospital de campaña fue instalado en las inmediaciones.
"ETA será derrotada" y "los que cometen este tipo de atentados terminarán todos donde tienen que terminar, en la justicia y en la cárcel", aseguró por su parte el vicepresidente tercero del gobierno, Manuel Cháves.
La casa cuartel de la Guardia Civil de Burgos, provincia que linda con el País Vasco, figuraba entre los objetivos de un comando de ETA desarticulado hace un año.
La Guardia Civil española es un objetivo prioritario de ETA, que en 41 años de lucha armada contra el Estado español y en favor de la independencia del País Vasco, asesinó a 826 personas.
Los últimos atentados contra una casa cuartel de la Guardia Civil fueron en agosto de 2007 en la localidad vasca de Durango, donde resultaron heridos dos agentes, y en mayo de 2008 en Legutiano, también en el País Vasco, donde murió una persona.
El último atentado atribuido a ETA se produjo en la madrugada de 10 de julio, cuando un bomba estalló delante de la sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE) en la localidad vizcaína de Durango.
El último atentado mortal de ETA fue el pasado 19 junio, cuando un policía murió al estallar una bomba colocada en su coche en Arrigorriaga, cerca de Bilbao.
La organización armada integra la lista de organizaciones terroristas de la Unión Europea (UE) y Estados Unidos.
ETA cumplió una tregua de algo más de un año, que concluyó en junio de 2007, durante la cual el gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero intentó negociar sin éxito el fin de la lucha armada.
Tras esa tregua, ETA reanudó sus atentados y desde entonces ha matado a siete personas. Por su parte, las policías española y francesa han detenido a decenas de sus miembros y a varios de sus jefes.
En los últimos meses, ETA también ha declarado como objetivo al nuevo gobierno regional del País Vasco, que por primera vez preside un socialista --Patxi López tras las elecciones del 1 de marzo--, después de casi 30 años de gobiernos nacionalistas.
La explosión contra la casa cuartel, donde viven los agentes con sus familias, causó 46 heridos leves, de ellos seis niños, indicaron a la AFP fuentes de la Guardia Civil. Dos de ellos fueron ingresados en un hospital y se encuentran en observación.
El delegado del gobierno español en la región de Castilla y León, Miguel Alejo, declaró a Radio Nacional de España (RNE), que "no ha habido aviso previo", como suele hacer ETA antes de perpetrar atentados para permitir la evacuación del lugar. Según Alejo, "hay restos que parecen ser de una furgoneta" que habría sido utilizada como vehículo bomba.
La fachada del edificio fue lo más dañado por la explosión y el ataque abrió un cráter en el suelo. Un hospital de campaña fue instalado en las inmediaciones.
"ETA será derrotada" y "los que cometen este tipo de atentados terminarán todos donde tienen que terminar, en la justicia y en la cárcel", aseguró por su parte el vicepresidente tercero del gobierno, Manuel Cháves.
La casa cuartel de la Guardia Civil de Burgos, provincia que linda con el País Vasco, figuraba entre los objetivos de un comando de ETA desarticulado hace un año.
La Guardia Civil española es un objetivo prioritario de ETA, que en 41 años de lucha armada contra el Estado español y en favor de la independencia del País Vasco, asesinó a 826 personas.
Los últimos atentados contra una casa cuartel de la Guardia Civil fueron en agosto de 2007 en la localidad vasca de Durango, donde resultaron heridos dos agentes, y en mayo de 2008 en Legutiano, también en el País Vasco, donde murió una persona.
El último atentado atribuido a ETA se produjo en la madrugada de 10 de julio, cuando un bomba estalló delante de la sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE) en la localidad vizcaína de Durango.
El último atentado mortal de ETA fue el pasado 19 junio, cuando un policía murió al estallar una bomba colocada en su coche en Arrigorriaga, cerca de Bilbao.
La organización armada integra la lista de organizaciones terroristas de la Unión Europea (UE) y Estados Unidos.
ETA cumplió una tregua de algo más de un año, que concluyó en junio de 2007, durante la cual el gobierno socialista español de José Luis Rodríguez Zapatero intentó negociar sin éxito el fin de la lucha armada.
Tras esa tregua, ETA reanudó sus atentados y desde entonces ha matado a siete personas. Por su parte, las policías española y francesa han detenido a decenas de sus miembros y a varios de sus jefes.
En los últimos meses, ETA también ha declarado como objetivo al nuevo gobierno regional del País Vasco, que por primera vez preside un socialista --Patxi López tras las elecciones del 1 de marzo--, después de casi 30 años de gobiernos nacionalistas.
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Página/12 - Argentina/29/07/2009
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