18/8/07

Un plan terrorífico y terrorista de dominación mundial

18/08/2007
Opinión
Carlos Dalmeier
-
Caracas-La combinación de un aumento explosivo de la población mundial, que según la oficina del censo de Estados Unidos, ha pasado de 2.556 millones de habitantes en 1950 a 6.528 millones en la actualidad, esperándose que alcance 9.404 millones en el año 2050, con el crecimiento incontrolado de la producción de bienes de consumo en los países más desarrollados, ha colocado en peligro de agotarse a importantes recursos naturales no renovables, siendo el petróleo el más emblemático de ellos, aunque no el único.Las direcciones políticas y sociales de las naciones más industrializadas se dieron cuenta de este peligro hace ya algunas décadas, y diseñaron y comenzaron a ejecutar un plan que busca garantizarles el apropiarse de esos recursos escasos tan necesarios para mantener sus actuales niveles de producción y de vida.En el aspecto energético, vital para sus sistemas económicos, se trazaron el objetivo estratégico de controlar militarmente las tres áreas con las reservas más importantes de crudo del mundo: Norteamérica, Medio Oriente y Venezuela, que en conjunto suman 921.000 millones de barriles, un 77% del total de las reservas mundiales, en tanto que las reservas existentes en el resto del planeta suman 279.700 millones de barriles.Este plan está muy avanzado. La primera zona, Norteamérica, de por si esta controlada. El Medio Oriente, aparte de la ocupación de Irak y Kuwait, posee ingentes cantidades de tropas en Arabia Saudita y Yemen y están buscando la forma de entrarle a Irán. Con relación a Venezuela, si bien no hay pruebas escritas que descubran esas intenciones, si lo hace la cantidad de eventos ocurridos en las ultimas décadas, que encuadran perfectamente dentro de los requisitos que Noam Chomsky enumera en su libro “Hegemonía o Supervivencia” para que un país sea intervenido, tal como lo describo en detalle en mi libro “El imperialismo recesivo del siglo XXI, su fase recesiva”.Pero lo más grave no es eso, lo verdaderamente terrorífico es el hecho de que de la actual producción mundial de petróleo, (más de 82 millones de barriles diarios) la mitad aproximadamente se extraen en las tres zonas objetivos (Norteamérica, Medio Oriente y Venezuela) y la otra mitad en el resto del mundo. Lo cual significa que si se mantienen esos valores, las reservas del resto del mundo se agotaran matemáticamente en 19 años, probablemente más, pero no mucho más, unos 30 años, con las nuevas exploraciones. Esto implica que, según el plan de dominación, en pocas décadas los países más industrializados tendrán el control militar y el monopolio de casi todas las reservas de petróleo del planeta. Lo que sumado a su inmenso poderío militar y al control de otras que tienen o pretenden imponer sobre otras fuentes de energía, significa que tendrán el mundo en un puño.Lo cual sería gravísimo para nuestra región latinoamericana, porque se estaría condenando inmisericordemente a nuestros pueblos al atraso y a la miseria. En efecto, los países latinoamericanos, exceptuando Venezuela, consumen 4.222.716 barriles diarios de petróleo y solo poseen 23.700 millones de barriles de reserva, que se agotarían en unos 15 años de mantenerse el actual ritmo de consumo, De darse el plan de dominación, se generaría una crisis catastrófica en la región. Ya Chile y Argentina, por ejemplo, han sentido recientemente el efecto de la escasez de energía.Es urgente que los latinoamericanos comprendamos la extrema gravedad de esta realidad, y comencemos concretar aceleradamente nuestra integración política, económica y militar, como única garantía de enfrentar exitosamente ese plan y de garantizar un futuro de prosperidad para nuestros pueblos./Intopress

No hay comentarios:

Publicar un comentario