La explotación minera en Perú atenta contra el equilibrio ecológico de ese país, mientras que en Ecuador la preservación de las reservas petroleras promueve opciones creativas.
La realidad productivo-ambiental de esos dos países andinos acaparó la atención de un nutrido público, especialmente juvenil, en el "Foro Político de la Confederación" en Berna.
Dicha actividad constituyó la tercera de seis conferencias del ciclo "Ecología y Desarrollo Sostenible. ¿Una quimera para América Latina?", organizado por la Asociación Latinoamérica-Suiza (ALAS).
Perú, riquezas naturales y tensión social
"Perú está viviendo un 'boom' minero desde hace casi una década... y ese tema es hoy de alta prioridad política y mediática", enfatiza Hildegard Willer, coordinadora de la Misión de Belén de Immensee (MBI) en Perú.
Los datos no faltan para subrayar la importancia de dicha producción en la economía nacional, según constata la responsable de dicha ONG helvética que desde años está presente en ese país andino.
"El sector minero representa el 54.5% del conjunto de las exportaciones así como el 6.6% del Producto Interno Bruto (PIB), según datos del 2003. Empleando ese mismo año más de 70.000 personas de forma directa y cerca de 350.000 de forma indirecta", puntualiza.
Importancia que se expresa también en el contexto internacional: "hoy Perú es el segundo mayor productor del mundo de plata, el tercero de cinco; el cuarto de plomo, el quinto de cobre y el sexto de oro", enfatiza Willer.
Sin embargo, según la coordinadora de MBI, "la minería en ese país representa una mezcla explosiva de oportunidades, riesgos, grandes ganancias y grandes perdedores".
Y una fuente de tensión casi permanente. "Sólo en el mes de junio la Defensoría del Pueblo contabilizó 75 conflictos sociales, la mitad de ellos de índole socio-ambiental".
Uno de los más recientes y significativos, el que confronta a campesinos con la empresa Majaz que programa una gran inversión minera sin consulta a las comunidades de la región.
La respuesta no se hizo esperar. "Unos 40.000 pobladores de esa zona se movilizaron y exigieron un plebiscito. 50 % acudió a las urnas y de votantes, un 90% se opuso a dicho proyecto", explica Willer.
Quien señala varios dilemas de fondo que atraviesan la realidad minera del Perú: la falta de consulta a las poblaciones locales; el acelerado desgaste ambiental de esa producción intensiva; y el debate no clarificado sobre los beneficiarios reales de las ganancias obtenidas en ese rubro.
"No pretendo que Perú y Latinoamérica sean un gran parque natural sin actividades productivas", pero lo cierto es que la consulta y la participación ciudadana se imponen como condiciones clave para un desarrollo durable, concluye la coordinadora de MBI.
Petróleo y medioambiente
Si se trata de búsquedas de alternativas para el desarrollo durable de la región andina, "el caso del Parque Yasuní en Ecuador tiene mucho de emblemático", enfatiza Carlos Larrea en diálogo con swissinfo.
Invitado por ALAS y Pan para el Prójimo a Suiza, el profesor de sociología de la Universidad Andina Simón Bolívar de Quito informa sobre un proyecto en marcha.
"El presidente Rafael Correa propuso no explotar los campos petroleros de Ishpingo - Tambococha – Tiputini (ITT), que se encuentran en el Parque Yasuni si la comunidad internacional ofrece como compensación un apoyo del 50 % de los eventuales beneficios que produciría la explotación del crudo", señala.
De esta manera, explica, "se estaría encontrando un mecanismo novedoso que podría profundizar y mejorar los postulados del Protocolo de Kyoto".
Y es al profesor Larrea, enumerar los tres impactos significativos de una propuesta de esta naturaleza: reducir el calentamiento climático; proteger una de las reservas ambientales más importantes de Ecuador y, al mismo tiempo, respetar el habitat de los pueblos indígenas allí ubicados.
"Esta propuesta innovadora es realizable dada la nueva sensibilidad ecológica planetaria en aumento", enfatiza Larrea.
Larrea es uno de los expertos que intenta cuantificar, a través de un sistemático estudio, las ventajas para el país y el mundo de tal iniciativa; los montos de la compensación internacional o, en su defecto, las cifras que obtendría Ecuador en caso de explotar a los precios actuales esta reserva de más de 900 millones de barriles de oro negro.
Una visión innovadora y casi futurista. Un paso adelante en la filosofía misma de Kyoto, insiste el profesor ecuatoriano. "Una iniciativa novedosa y única en el continente latinoamericano, una visión estratégica de desarrollo durable, en tanto busca premiar la prevención efectiva del medio ambiente. Mientras que Kyoto – que ha implicado avances reales pero insuficientes- hace pagar por las emisiones que lo ensucian", concluye.
El petróleo representa el 40% de las ventas externas ecuatorianas.
Las tensiones entre explotación intensiva de los recursos naturales y el desgaste del medio ambiente ha marcado la historia de ambas naciones. Y ocasiona constantes focos de tensión social.
Tanto en Perú como en Ecuador la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) participa en algunos proyectos destinados a la protección medioambiental.
DATOS CLAVE
El Parque Nacional Yasuní, declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1989, comprende una extensión de 982.000 hectáreas.
Se extiende en las cuencas de los ríos Yasuní, Cononaco, Nashiño y Tiputini, en la Amazonía ecuatoriana.
En este Parque ya se encuentran operando tres transnacionales petroleras: Repsol-YPF (española argentina), Pérez Companc (argentina) y Vintage ( estadounidense).
Las operaciones actuales ya han provocando graves impactos ambientales y sociales al pueblo ancestral Huaorani que vive en esta zona.
Petroecuador, empresa nacional, tiene hasta el momento a su cargo el proyecto ITT.
ENLACES
Universidad Andina de Quito
ALAS
Misión de Belén Immensee
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario