6/9/07

Rusia-Indonesia: hacia nuevos horizontes de cooperación

Vladímir Putin
En vísperas de mi vista oficial a Indonesia, quisiera compartir algunas reflexiones sobre el presente y el futuro de las relaciones entre nuestros países. Reflexiones sobre aquellos aspectos que sirven de base a una cooperación que ya tiene más de medio siglo, y también de sobre cómo se perfilan las perspectivas de la interacción bilateral al comienzo del nuevo milenio.
Rusia e Indonesia no sólo son dos Estados de extenso territorio y numerosa población, sino también dos civilizaciones autóctonas muy antiguas. Dos importantes conglomerados de una riqueza cultural considerable. Yakarta, como Moscú, son capitales de Estados multinacionales en donde vive y trabaja gente de diferentes etnias y religiones en el transcurso de muchos siglos. Ambos Estados pasaron complicados caminos de desarrollo histórico, y tras el dinámico desarrollo que viven actualmente y los logros obtenidos en la arena internacional se encuentran el trabajo creador y el esfuerzo persistente de nuestros pueblos.
Al examinar la historia de las relaciones ruso-indonesias, antes que todo recordamos sus páginas gloriosas. Nuestro país fue uno de los primeros en reconocer la independencia de Indonesia al manifestar su solidaridad con el pueblo indonesio en su lucha por la libertad. Nos enorgullece constatar que con ayuda de los especialistas soviéticos fueron construidas obras como la planta metalúrgica Krakatau, la red de carreteras en Kalimantan, el hospital Druzhba (Amistad), el estadio Bung Karno en Yakarta, y un reactor nuclear experimental en Yokyakarta.
En correspondencia a estas tradiciones de interacción, Rusia tendió a Indonesia su mano amiga en los aciagos momentos relacionados con el cataclismo natural ocurrido en diciembre de 2004. Me satisface que nuestros amigos indonesios saben y no se olvidan de ello.
Debo resaltar que en los últimos tiempos las relaciones entre Rusia e Indonesia adquieren una nueva y positiva dinámica al convertirse en los vectores más significativos de la agenda internacional para ambos países.
De forma segura avanza el dialogo político entre Moscú y Yakarta.
Uno de los acontecimientos notables de este diálogo supuso la visita oficial a Rusia del Presidente de la República de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono a finales de 2006.
La visita de S.B. Yudhoyono confirmó que la cooperación ruso-indonesia, en el marco de la declaración bilateral de amistad y asociación en el siglo XXI firmada en 2003, cada vez cuenta con las mejores perspectivas.
Otra evidencia del interés reciproco de profundizar la cooperación, se refleja en las activas relaciones a nivel interparlamentario y la interacción a nivel de ministerios e instituciones gubernamentales.
Hoy, nosotros queremos más que una aproximación recíproca, estamos dispuestos a abrir una nueva etapa en las relaciones con Indonesia. Considero que para ello ya existe una base sólida, una experiencia comprobada y premisas de peso.
Comprendemos la política exterior de Yakarta activa e independiente, y su aspiración de desempeñar un papel constructivo en los asuntos regionales y de dimensión internacional.
Un reconocimiento de la autoridad de Indonesia en la arena mundial fue su elección como miembro rotativo del Consejo de Seguridad de la ONU para el período 2007-2008.
La similitud de posturas en asuntos cruciales del momento ha permitido a los representantes rusos e indonesios desarrollar una estrecha interacción en el marco de la Organización de Naciones Unidas.
En la etapa actual, en momentos cuando las relaciones internacionales atraviesan un complejo período de transformación, y se plantea el futuro del orden mundial, Rusia e Indonesia se manifiestan a favor de fortalecer el principio universal de la decisión colectiva y la supremacía del Derecho Internacional.
Otro punto de vista común está relacionado con el reconocimiento del papel central de la ONU que goza de una legitimidad única. Nosotros también compartimos el principio de respeto a la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia en los asuntos internos.
Y lo más importante, estamos dispuestos a ampliar la cooperación con todos los socios interesados en la implementación de un orden mundial justo que garantice la estabilidad y la seguridad a nivel regional y global.
En diciembre del año pasado, el presidente indonesio, S.B. Yudhoyono visitó la Mezquita Mayor en San Petersburgo, la más grande de Rusia y una de las mayores de Europa. Para nosotros esa visita fue más que un símbolo. Nosotros nos manifestamos a favor del respeto mutuo con todo lo relacionado con las culturas y civilizaciones. Para Rusia tiene especial interés el dialogo con Indonesia en calidad de uno de los países líder del mundo islámico y con la población musulmana más numerosa del mundo. En este sentido estamos dispuestos a buscar de manera conjunta las vías para allanar el tan necesario entendimiento entre las religiones, entre otros, en el marco de la Organización de la Conferencia Islámica, entidad en donde Rusia adquirió el estatuto de país observador con el apoyo de Indonesia.
Lo importante es que el dialogo entre políticos se fortalezca con contactos entre los líderes de organizaciones sociales, las agrupaciones juveniles y la población de nuestros países. En este contexto, es necesario intensificar la cooperación humanitaria en los ámbitos de la educación y la cultura cuyos potenciales todavía no han sido debidamente aprovechados.
Vemos a Indonesia como uno de los socios de más perspectiva de Rusia en la región de Asia-el Pacífico, "el punto de crecimiento" más importante de la economía mundial.
En los últimos años, el intercambio comercial entre ambos países prácticamente se duplicó. Indudablemente, esto es un buen indicador. Pero el volumen actual de comercio por un valor de 600 millones de dólares difícilmente se corresponde al potencial de ambos países con una población conjunta que se aproxima a las 400 millones de personas.
Nos parece completamente factible que en los próximos años ese intercambio comercial llegue a 1.000 millones de dólares.
El logro de este objetivo implica el perfeccionamiento de la base legal, como también la diversificación de las relaciones económicas que deben extenderse a la aplicación de altas tecnologías y el desarrollo de la cooperación científica y técnica. Entre las direcciones de más perspectiva destacamos el sector energético, la tecnología espacial, las telecomunicaciones, la industria aeronáutica y la aplicación pacífica de la energía nuclear.
Necesitamos un arranque serio en la cooperación interbancaria y las inversiones. En este campo de forma activa trabajan los gobiernos y las principales empresas de ambos países. Una buena ocasión para la discusión de este bloque de asuntos se perfila en el foro económico Rusia-Indonesia que tendrá lugar en el curso de mi visita. Su celebración, una vez más confirmará el creciente y recíproco interés entre los sectores empresariales y comerciales rusos e indonesios.
Cada año cada vez son más los rusos que viajan a Indonesia para descubrir el mundo increíble y multifacético que representa la naturaleza y cultura indonesia. En 2006 el número de turistas rusos que visitaron Indonesia superaron las 20.000 personas, y este no es el límite. Esperamos a los turistas indonesios en nuestro país.
Cuento con que mi visita a Indonesia dará un impulso nuevo y substancial al encuentro de nuestros países y favorecerá el establecimiento de una sólida y duradera asociación bilateral en base a la amistad y la confianza. Estoy seguro de que tememos todo lo necesario para conseguirlo. ¡Hasta la vista en Yakarta!
-
-
-
RIA Novosti - Russia/06/09/2007

No hay comentarios:

Publicar un comentario