Asumió Strauss Kahn en el FMI y ratificó su política reformista
El ex ministro francés reemplazó a Rodrigo Rato en la conducción del organismo. Su intención es mejorar la relación del Fondo con los países emergentes
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El ex ministro de Finanzas francés Dominique Strauss-Kahn asumió este jueves la conducción del Fondo Monetario Internacional (FMI), en reemplazo del español Rodrigo Rato, y volvió a ratificar su decisión de ir "más rápido y más lejos" en la reforma del organismo.
"Me definí durante la campaña como un candidato de la reforma; por lo tanto, fui electo para la reforma. Voy a partir de lo que Rato hizo en los últimos años, pero iré más lejos y más rápido en la reforma de la institución", enfatizó el economista francés.
Las palabras de Strass Khan buscan reposicionar la función del FMI y su relación con el mundo, en especial con los países emergentes, de los que forma parte Argentina, que reclaman una mayor cuota de poder y el fin de los programas de ajustes impulsados en el pasado por el organismo, sin tener en cuenta la realidad de cada país.
Antes de ser desginado director gerente del FMI, el funcionario francés visitó en los primeros días de septiembre la Argentina, donde se reunió con el presidente Néstor Kirchner y la presidenta electa Cristina Fernández de Kirchner.
Sin salirse de la línea de discurso que lo llevó a hacerse del sillón de gerente general del Fondo, Strauss-Kahn manifestó este jueves su intención de encarar una reforma debido a que "el objetivo de la institución no cambió, pero sí lo hizo el mundo, de forma espectacular".
Entre los puntos principales de la impronta que el ex ministro galo podría imponer a su gestión se destaca la intención de lograr una redistribución más equitativa de los votos para equilibrar la representación de países emergentes, como China, India o Brasil, por su fuerte participación en la economía mundial.
"En particular los cambios son para dar una voz más fuerte a los principales mercados emergentes y los países de bajos ingresos al interior de la institución", dijo el flamante director gerente, según consigna el FMI en su comunicado.
Para lograr este cambio deberá llegar a un acuerdo entre 185 miembros del organismo para incrementar los derechos de voto de los países emergentes, hasta hoy escasamente representados.
Desde el vamos el proyecto tiene la oposición de los países más desarrollados, principalmente los europeos, que son reticentes a ceder parte de su poder de voto.
Las intenciones del ministro ya habían quedado en claro cuando se conoció su candidatura, en especial cuando recibió el apoyo clave de Estados Unidos para convertirse en el nuevo jefe del Fondo.
Durante su visita al país, en la que fue recibido también por el ministro de Economía, Miguel Peirano, y el titular del Banco Central, Martín Redrado, Strauss-Kahn manifestó sus intenciones de cambio y adelantó al gobierno su decisión de "colaborar" en la negociación que el país pretende abordar con el Club de París.
El estatuto de esta entidad establece que para avanzar en la negociación el deudor primero debe alcanzar un acuerdo con el Fondo, algo que es rechazado por el gobierno argentino.
No obstante, el francés le reiteró hace un par se semanas a Peirano, durante la asamblea anual del organismo en Washington, su compromiso para diseñar algún tipo de aval a la negociación para refinanciar la deuda de 6.200 millones de dólares que el país tiene con el Club de París.
La asunción se llevó a cabo en medio de un ambiente de normalidad, en contraste con la gran atención que el ex ministro de Finanzas galo recibió durante la última asamblea conjunta del FMI y el Banco Mundial.
Strauss-Khan asume "en medio de las preocupaciones" sobre el impacto en la economía global de las recientes turbulencias financieras provocadas por la crisis de pagos de las hipotecas de riesgo en Estados Unidos, destaca el Fondo en su comunicado.
El saliente Rato anunció en junio último su retiro anticipado como líder del FMI, argumentando "razones personales" y descartando un eventual retorno al escenario político de su país.
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El ex ministro de Finanzas francés Dominique Strauss-Kahn asumió este jueves la conducción del Fondo Monetario Internacional (FMI), en reemplazo del español Rodrigo Rato, y volvió a ratificar su decisión de ir "más rápido y más lejos" en la reforma del organismo.
"Me definí durante la campaña como un candidato de la reforma; por lo tanto, fui electo para la reforma. Voy a partir de lo que Rato hizo en los últimos años, pero iré más lejos y más rápido en la reforma de la institución", enfatizó el economista francés.
Las palabras de Strass Khan buscan reposicionar la función del FMI y su relación con el mundo, en especial con los países emergentes, de los que forma parte Argentina, que reclaman una mayor cuota de poder y el fin de los programas de ajustes impulsados en el pasado por el organismo, sin tener en cuenta la realidad de cada país.
Antes de ser desginado director gerente del FMI, el funcionario francés visitó en los primeros días de septiembre la Argentina, donde se reunió con el presidente Néstor Kirchner y la presidenta electa Cristina Fernández de Kirchner.
Sin salirse de la línea de discurso que lo llevó a hacerse del sillón de gerente general del Fondo, Strauss-Kahn manifestó este jueves su intención de encarar una reforma debido a que "el objetivo de la institución no cambió, pero sí lo hizo el mundo, de forma espectacular".
Entre los puntos principales de la impronta que el ex ministro galo podría imponer a su gestión se destaca la intención de lograr una redistribución más equitativa de los votos para equilibrar la representación de países emergentes, como China, India o Brasil, por su fuerte participación en la economía mundial.
"En particular los cambios son para dar una voz más fuerte a los principales mercados emergentes y los países de bajos ingresos al interior de la institución", dijo el flamante director gerente, según consigna el FMI en su comunicado.
Para lograr este cambio deberá llegar a un acuerdo entre 185 miembros del organismo para incrementar los derechos de voto de los países emergentes, hasta hoy escasamente representados.
Desde el vamos el proyecto tiene la oposición de los países más desarrollados, principalmente los europeos, que son reticentes a ceder parte de su poder de voto.
Las intenciones del ministro ya habían quedado en claro cuando se conoció su candidatura, en especial cuando recibió el apoyo clave de Estados Unidos para convertirse en el nuevo jefe del Fondo.
Durante su visita al país, en la que fue recibido también por el ministro de Economía, Miguel Peirano, y el titular del Banco Central, Martín Redrado, Strauss-Kahn manifestó sus intenciones de cambio y adelantó al gobierno su decisión de "colaborar" en la negociación que el país pretende abordar con el Club de París.
El estatuto de esta entidad establece que para avanzar en la negociación el deudor primero debe alcanzar un acuerdo con el Fondo, algo que es rechazado por el gobierno argentino.
No obstante, el francés le reiteró hace un par se semanas a Peirano, durante la asamblea anual del organismo en Washington, su compromiso para diseñar algún tipo de aval a la negociación para refinanciar la deuda de 6.200 millones de dólares que el país tiene con el Club de París.
La asunción se llevó a cabo en medio de un ambiente de normalidad, en contraste con la gran atención que el ex ministro de Finanzas galo recibió durante la última asamblea conjunta del FMI y el Banco Mundial.
Strauss-Khan asume "en medio de las preocupaciones" sobre el impacto en la economía global de las recientes turbulencias financieras provocadas por la crisis de pagos de las hipotecas de riesgo en Estados Unidos, destaca el Fondo en su comunicado.
El saliente Rato anunció en junio último su retiro anticipado como líder del FMI, argumentando "razones personales" y descartando un eventual retorno al escenario político de su país.
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infoBAE profesional - Argentina/02/11/2007
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