Gabón: evolución de las relaciones con Francia
Senegal y Gabón han sido los primeros países francófonos del África subsahariana que Nicolas Sarkozy ha visitado como presidente de Francia. Un viaje estratégico para renovar las relaciones de amistad y cooperación que unen a Francia con la ex colonia Africana y para explicar las nuevas estrategias políticas del Elíseo. Colonialismo, deuda pública y valoración de los recursos forestales han sido los puntos clave abordados por Sarkozy y su homólogo gabonés, Omar Bongo, desde una perspectiva de reformas que contempla a Gabón como un socio comercial privilegiado. En tema de política global, Sarkozy ha auspiciado el nacimiento de los Estados Unidos de África, dotados de instrumentos institucionales y recursos económicos con los que poder afrontar de manera independiente los desafíos del nuevo milenio.
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Serena Grassia
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“Buen gobierno” para el renacimiento económico y político del país
Sarkozy se ha presentado como el presidente de la ruptura en la política franco-africana. Hasta el momento, Jacques Chirac había mantenido contactos personales con jefes de estado africanos, siendo acusado en ocasiones de haber prestado apoyo a los regímenes más brutales y discutibles del África postcolonial para satisfacer intereses franceses. Sarkozy, probablemente para hacer frente a los emergentes intereses americanos y chinos en el África subsahariana, particularmente en área occidental, apunta a una asociación de tipo comercial que sustituya el viejo concepto de la ayuda y la asistencia en favor de una política más moderna basada en la cooperación bilateral y el respeto mutuo. Gabón sería uno de los países más interesados en éste tipo de aproximación. En el discurso oficial que tuvo lugar en Libreville, el nuevo Presidente atacó duramente el colonialismo, definiéndolo como un “error” francés, pero subrayando que la corrupción, la dictadura y los genocidios de los que África ha sido escenario no se pueden considerar como una consecuencia directa del colonialismo. Durante el discurso, tuvo ocasión de exhortar a Gabón a la práctica del “buen gobierno”, con una política transparente, incisiva contra la corrupción y conforme a las necesidades de la colectividad. Su objetivo es borrar cualquier huella de la vieja política colonial francesa, reduciendo la presencia militar que París mantiene en la ex colonia, que comporta una asignación de casi 11.000 soldados, 800 de los cuales se afincan en la capital Libreville.
La imagen de Sarkozy en Gabón siempre ha estado vinculada a su actividad como ministro del Interior, atendiendo sobre todo a los problemas derivados de la inmigración. La reforma adoptada el año pasado para regular el fenómeno migratorio gabonés hacia Francia - privilegiando los ingresos funcionales a las exigencias del mercado y tendiendo a alargar el tiempo para la reunificación de las familias-, llevaba su firma.Según declaraciones del Presidente en su última visita a Libreville, la adopción de éstas disposiciones permitiría a Gabón liberarse de la ayuda humanitaria y de la financiación internacional de la que tiene una necesidad incesante, apoyándose en su propia fuerza de trabajo, manual e intelectual, y evitando la dispersión en Europa.
La política del Elíseo cambia como consecuencia del cambio en el escenario internacional. Actualmente, París no puede ignorar que China se está extendiendo como una mancha de aceite entre los países africanos -Gabón incluido-, a través de una serie de acuerdos de cooperación financiera y económica que buscan sobre todo la implementación de las infraestructuras de explotación de recursos energéticos y minerales.Con este propósito, cabe destacar un proyecto que prevé la construcción de 3.000 viviendas en las localidades de Agondj’e’, Bike’le’ y Igoumenie’, asignadas al grupo chino Chongqing Road Engineering, que será también socio financiero del Gobierno. Ya en el pasado, inversores locales y extranjeros se habían arriesgado en operaciones de este tipo, que sin embargo nunca han llegado a concretarse debido a los elevados precios de la asistencia sanitaria y de las construcciones, insostenibles para la población indígena. En ésta ocasión, se ha confiado en una constructora china, que trabajará bajo la supervisión de una sociedad italiana, la Elcostep, para rebajar los costes de producción y mano de obra, incentivando así al sector inmobiliario.Algunos expertos sostienen que China ha desbancado la supremacía económica francesa, percibida por muchos como uno de los principales impedimentos para el desarrollo gabonés, y no precisamente en el marco comercial, dependiente de la presencia de múltiples operadores financieros en el territorio.Baste pensar que las dos principales compañías que trabajan en el sector petrolífero, la Total Participation y a Total Gabon, son subsidiarias del grupo francés Total y monopolizan el 40% de la economía petrolífera de territorio, gestionando las exportaciones hacia Francia.
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Serena Grassia
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“Buen gobierno” para el renacimiento económico y político del país
Sarkozy se ha presentado como el presidente de la ruptura en la política franco-africana. Hasta el momento, Jacques Chirac había mantenido contactos personales con jefes de estado africanos, siendo acusado en ocasiones de haber prestado apoyo a los regímenes más brutales y discutibles del África postcolonial para satisfacer intereses franceses. Sarkozy, probablemente para hacer frente a los emergentes intereses americanos y chinos en el África subsahariana, particularmente en área occidental, apunta a una asociación de tipo comercial que sustituya el viejo concepto de la ayuda y la asistencia en favor de una política más moderna basada en la cooperación bilateral y el respeto mutuo. Gabón sería uno de los países más interesados en éste tipo de aproximación. En el discurso oficial que tuvo lugar en Libreville, el nuevo Presidente atacó duramente el colonialismo, definiéndolo como un “error” francés, pero subrayando que la corrupción, la dictadura y los genocidios de los que África ha sido escenario no se pueden considerar como una consecuencia directa del colonialismo. Durante el discurso, tuvo ocasión de exhortar a Gabón a la práctica del “buen gobierno”, con una política transparente, incisiva contra la corrupción y conforme a las necesidades de la colectividad. Su objetivo es borrar cualquier huella de la vieja política colonial francesa, reduciendo la presencia militar que París mantiene en la ex colonia, que comporta una asignación de casi 11.000 soldados, 800 de los cuales se afincan en la capital Libreville.
La imagen de Sarkozy en Gabón siempre ha estado vinculada a su actividad como ministro del Interior, atendiendo sobre todo a los problemas derivados de la inmigración. La reforma adoptada el año pasado para regular el fenómeno migratorio gabonés hacia Francia - privilegiando los ingresos funcionales a las exigencias del mercado y tendiendo a alargar el tiempo para la reunificación de las familias-, llevaba su firma.Según declaraciones del Presidente en su última visita a Libreville, la adopción de éstas disposiciones permitiría a Gabón liberarse de la ayuda humanitaria y de la financiación internacional de la que tiene una necesidad incesante, apoyándose en su propia fuerza de trabajo, manual e intelectual, y evitando la dispersión en Europa.
La política del Elíseo cambia como consecuencia del cambio en el escenario internacional. Actualmente, París no puede ignorar que China se está extendiendo como una mancha de aceite entre los países africanos -Gabón incluido-, a través de una serie de acuerdos de cooperación financiera y económica que buscan sobre todo la implementación de las infraestructuras de explotación de recursos energéticos y minerales.Con este propósito, cabe destacar un proyecto que prevé la construcción de 3.000 viviendas en las localidades de Agondj’e’, Bike’le’ y Igoumenie’, asignadas al grupo chino Chongqing Road Engineering, que será también socio financiero del Gobierno. Ya en el pasado, inversores locales y extranjeros se habían arriesgado en operaciones de este tipo, que sin embargo nunca han llegado a concretarse debido a los elevados precios de la asistencia sanitaria y de las construcciones, insostenibles para la población indígena. En ésta ocasión, se ha confiado en una constructora china, que trabajará bajo la supervisión de una sociedad italiana, la Elcostep, para rebajar los costes de producción y mano de obra, incentivando así al sector inmobiliario.Algunos expertos sostienen que China ha desbancado la supremacía económica francesa, percibida por muchos como uno de los principales impedimentos para el desarrollo gabonés, y no precisamente en el marco comercial, dependiente de la presencia de múltiples operadores financieros en el territorio.Baste pensar que las dos principales compañías que trabajan en el sector petrolífero, la Total Participation y a Total Gabon, son subsidiarias del grupo francés Total y monopolizan el 40% de la economía petrolífera de territorio, gestionando las exportaciones hacia Francia.
Crisis económica entre la deuda pública y el encarecimiento de los precios
Gabón se encuentra en un momento difícil debido a la ingente deuda pública, que asciende a 2.500 millones de dólares, según informaba el Elíseo el pasado febrero, de los cuales 1.100 millones se deberían a Francia.A pesar de ser el país número 37 en la lista de productores mundiales de crudo y el quinto en el África subsahariana después de Nigeria, Angola, Guinea Ecuatorial y Sudán; y a pesar de contar con inmensos recursos minerales y naturales, Gabón es, según la Agencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo, uno de los países más pobres del mundo. Esto se debe, principalmente, a una economía poco activa y estructuralmente dependiente del petróleo y, como tal, sujeta a las variaciones de los precios internacionales.
Recientemente, las autoridades se han dirigido al Fondo Monetario Internacional (FMI) para solicitar una reconsideración de la deuda y, sobre todo, plantear una operación de compensación directa, proponiendo el pago inmediato de la deuda contraída a cambio de una reducción significativa de la misma (15%). El Club de París ha dejado que sea cada país acreedor si acepta o no la propuesta, para a cual se han fijado dos plazos límite: el 2 de diciembre del 2007 y el 30 de enero de 2008. El Elíseo, al tener intereses económicos particularmente consistentes en ésta parte de África (cerca del 70% de la economía global gabonesa), ha optado por una reducción del 20% y ha decidido destinar parte de éstos fondos, cerca de 50 millones de dólares, a las ONG que operan en el territorio para a conservación de las superficies forestales. ecuatoriales. Superficie que representa una importante fuente de energía y materias primas para Francia y que compensa las emisiones de gas invernadero de la ex metrópoli cuatro veces más altas.
Para agravar las ya difíciles condiciones económicas y el injustificado encarecimiento del precio en los bienes de primera necesidad, en particular, la leche, el agua y el pescado, provocado -según denuncia el Gobierno- por los operadores económicos que con sus especulaciones perjudicana la sociedad civil cuyo poder de adquisición disminuye proporcionalmente al aumento de los precios.
Conclusiones
En el 2007 se ha registrado una tasa de inflación muy elevada, en torno al 4,7%, determinada por el encarecimiento de los precios de los bienes de primera necesidad; mientras que se prevé un descenso de los mismos igual a 2,8% en el transcurso del 2008, gracias a una disminución de del precio de los carburantes. El crecimiento de PIB ha sido del 4% a lo largo del 2007, y alcanzará cerca del 3,5% en el 2008.Las perspectivas de desarrollo futuro en Gabón son, por tanto, positivas; sobre todo en virtud de la expansión de sectores productivos alternativos al petróleo: silvicultura, recursos minerales, y sus importantes importaciones pesqueras. Por otro lado, nuevos acuerdos comerciales con países extranjeros, China a la cabeza de la lista, despiertan el interés extranjero mediante inversiones en el país.
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Equilibri.net - Italy/18/09/2007
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