Analiza la Peña Vareliana relaciones entre Chávez y Cuba

De izquierda a derecha, Rafael Abislaimán, Rogelio de la Torre, y Germán Miret. Miguel Zaldivar, en el uso de la palabra.

Ariel Remos

DIARIO LAS AMERICAS.com/INICIO /12/05/2007
Las relaciones del presidente de Venezuela Hugo Chávez, con Cuba, fueron discutidas en la última Peña Vareliana, y la ponencia estuvo a cargo del Dr. Miguel Zaldívar, abogado cubano que vivió muchos años en la patria de Bolívar. Sus primeras palabras fueron dedicadas a los primeros años y familiares de Chávez.

Destacó que frente a la casa de su abuela, con quien vivía, residía un comunista que había vivido en Rusia muchos años, inculcándoles a Chávez y a su hermano Adán la doctrina marxista desde muy joven. Señaló también que, según sus biógrafos, dos pasiones tiene Chávez: el marxismo y la pelota (béisbol), y que gracias a esta ‘ultima fue que logró ingresar en la academia militar, reclutado por el “manager” del equipo de pelota del ejército. Fue una lástima –apuntó el ponente—que Chávez resultara un mal pelotero, porque no hubiera habido que padecerlo como gobernante.

Después de varios años en el ejército, Chávez fue nombrado sub-teniente, y finalmente llegó a ser teniente coronel de paracaidistas. Dentro del ejército fundó el movimiento llamado Ejército Bolivariano Revolucionario, y el 4 de febrero de 1992 produjo un alzamiento militar. El intento fracasó y Chávez fue hecho prisionero, pero se le permitió hacer una alocución a la nación en la que afirmó que la revolución triunfaría, con el cual adquirió gran popularidad. En sus años de cárcel se rodeó de connotados marxistas, entre ellos José miquelena, José Vicente Rangel y Edmundo Chirino.

En definitiva, en 1994, el expediente criminal de Chávez fue archivado por órdenes del entonces presidente de Venezuela Rafael Caldera, sin ser sometido a juicio. Esto evitó que tuviera antecedentes penales, lo cual le hubiera impedido aspirar a cargos públicos.

Por esta época en Venezuela se empezaron a realizar convenciones de todo tipo, a las cuales asistían representantes de todos los sectores izquierditas de América Latina, y por supuesto, del gobierno cubano, con la consecuencia de que produjera una penetración subversiva en toda América Latina.

En cuanto a las relaciones entre Chávez y el tirano Castro, Zaldívar indicó que debían considerarse dos etapas, comprendiendo la primera desde 1959 hasta 1999, a la que se le puede considerar como los antecedentes históricos de la conquista de Venezuela por Castro.

Resulta asombroso que cuando Castro hizo su primer viaje al extranjero el 23 de enero de 1959, visitó a Venezuela donde afirmó públicamente que Cuba era muy poco para él y que tenía que conquistar a Venezuela para extender la revolución a toda América Latina.

Poco después, entre 1960 y 1964, Castro envió a Venezuela con guerrilleros armados a dos de sus estrella militares, el comandante Tomasevich y Arnaldo Ochoa, que entonces ostentaba el grado de capitán. Estos guerrilleros, unidos a otros venezolanos, establecieron dos frentes: uno en el estado de Falcón, y el otro en el estado de Miranda, pero esos intentos fracasaron y los cubanos tuvieron que retirarse.

En 1994, cuando Chávez fue dejado en libertad, lo primero que hizo fue visitar al tirano, quien lo recibió como si fuera un jefe de estado y lo llevó a todas partes en Cuba. Más tarde, una vez que Chávez ganó las elecciones en 1998, lo primero que hizo otra vez fue ir a Cuba a celebrar el triunfo con Fidel Castro, y poco después, cuando tomó posesión del cargo, Castro se pasó dos semanas en Venezuela, recorriendo todo el país junto a Chávez.

Aquí se inició la segunda etapa e las relaciones entre Chávez y Castro, porque entonces se produjo la conquista efectiva de Venezuela por Castro, a través de los asesores militares, la asistencia médica en el campo de la salud, y la asistencia educacional.

Por último, el ponente indicó que, en su opinión, la situación de Venezuela podía evolucionar a uno de tres modelos. El modelo cubano, donde el gobierno lo controla todo. El modelo chino, done hay control político y cierta libertad económica. O una mezcla de esos modelos, con la particularidad de que los precios del petróleo le permitiría al gobierno distribuir dinero entre la población.