ESCARBANDO en LQ Somos
Reflexiones del golpe de estado
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Honduras en la encrucijada, ahí se juega todo.
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Por fin los gringos, parece, que se han salido con la suya. Lo han estado intentando desde hace años ( aunque no lo digan ni lo reconozcan abiertamente) sobre los intentos o amagos de “golpes de estado” en el Sur del continente. Ellos, los gringos, están por derrocar a aquellos presidentes latinoamericanos que no obedecen sus lineamientos políticos y, a quienes muchas veces, consideran “nacionalistas progres”; lo intentaron en el 2002 con Chávez en Venezuela, Bolivia, Ecuador. El golpe de Estado en Honduras recuerda aquel que tuvo lugar en Haití, en 2004, contra el presidente Jean-Bertrand Aristide: secuestro en plena madrugada por soldados encapuchados y “aparición” de una carta de renuncia.
Las burguesías latinoamericanas acostumbradas a hacer lo que se les atoja con la ayuda de los gringos, no quieren que sus privilegios se les vaya de las manos. Así pues, las burguesías locales – y lacayas -, continúan creando inestabilidad en los Países donde no gobiernan. Detrás, están los norteamericanos con sus financiaciones a organismos fantasmas, o, a través de sus empresas gringas y/o a las empresas de las burguesías locales. Los pasos que siguen, casi siempre, en los golpes de estado, son los mismos. Ahora sin embargo, cubren sus intentonas golpistas con movilizaciones “dizque” populares, así lo hicieron en Ucrania y su bufanda naranja. Recientemente en Irán con el lazo verde, y lo estamos viendo ahora en Honduras, la burguesía y su “gorilleti” (alias Michelleti), el color blanco.
Esta vez ha sido en Honduras. Y era de esperar. Recientemente, fue este país - y en la ciudad de San Pedro Sula - donde al Imperio yanqui se le asestó un duro golpe político e ideológico. Haciendo que el orden “democrático” (que nunca ha existido) por fin se instalara en la OEA. Quitando el artículo por el cual se le expulsa a Cuba. Quizá sea esta una de las razones por la que los gringos y la CIA junto a las fuerzas armadas y la burguesía Hondureña planificaron el Golpe este golpe de estado. Otra de las razones es que Honduras sea el país más débil de la alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
Volviendo a los métodos de represión y control de años atrás.
En los años ochenta los gringos utilizaron este territorio - con la venia de la burguesía y las fuerzas armadas - como la policía centroamericana. Ellos, debían de vigilar y controlar a los “comunistas” de Guatemala, El Salvador y Nicaragua. Con las bases militares impuestas a ese país centroamericano, la represión, los secuestros y asesinatos a dirigentes populares y sindicales para acabar con los movimientos de izquierdas, era el pago de Honduras, para que recibieran loores de los gringos. Su ejército, la policía y la burguesía se encargaron de mantener a la población hondureña bajo control, para ello se valieron de los escuadrones de la muerte. Sólo de esa manera se garantizaba meterle miedo a la población por un lado, y por el otro convertir a los hondureños en “policías” que debían de ejercer un control a sus mismos compatriotas y a sus países vecinos y rebeldes.
La represión policial fue de tal envergadura que en pocos años acabaron con el movimiento popular y sus líderes. Se estableció así un férreo control policial sobre la población. Aunque fue a Nicaragua a quien se le agredió desde Honduras, con la “Contra”, financiada por los usamericano para lograrlo había de contar con el compadrazgo burgués de ese país. Durante la revolución sandinista en Nicaragua, Washington utilizó Honduras como base de retaguardia de las bandas contrarrevolucionarias. Bajo la dirección de John Negroponte, la embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa se convirtió en cuartel general de los «contras» nicaragüenses y de sus escuadrones de la muerte. Transcurridos los años, y, una vez finalizada la guerra e el Salvador, Guatemala, y antes Nicaragua. “Caído” el muro de Berlín y el inesperado desmembramiento de la URSS, parecía que las cosas iban a cambiar.
Todos estamos observando los cambios que se vienen dando en América latina…, Honduras también se ha sumado a esos cambios. Fue precisamente un presidente salido de la misma burguesía hondureña el que propuso cambios desde el gobierno para intentar palear y mejorar las condiciones de vida de sus compatriotas, y, es esto lo que no le perdonan la burguesía y el ejército.
Honduras en la encrucijada.
Han pasado los años de la guerra fría pero la burguesía hondureña sigue pensando que este mundo no ha cambiado. Creen que pueden convencer con sus argumentos trasnochados y fascistas a una población que por fin ha despertado. El status quo no quiere que el pueblo pobre hondureño tome las riendas de su destino, y, esta es otra de las razones por la que los gringos han apoyado este Golpe. Eso sí, ellos creían que el pueblo hondureño no iba a responder saliendo a las calles para exigir el regreso de su presidente Zelaya. Creían que, como en los ochenta el pueblo hondureño iba a “someterse” o seguirían las consignas dictadas por el gobierno de facto, pero se han equivocado.
La población de Honduras ha despertado y ahora son conscientes de que deben de ser sujetos de su historia. También el pueblo, se ha dado cuenta que ellos, sí, pueden cambiar la historia del País, que son ellos, precisamente los que eligen o no a su gobernantes. Algo ha cambiado en la población de honduras y lo vemos en las calles a pesar de las amenazas, la represión y los asesinatos…, la burguesía, el ejército y los gringos se han equivocado en el análisis al ahora de llevar a la práctica el golpe de Estado. Creían que el pueblo seguía viviendo como en la década de los ochenta pero se han equivocado.
Este golpe era – y es – un mensaje claro a todo el continente latinoamericano y más a aquellos países que están por la vía de los cambios sociales, y más concretamente a los miembros del ALBA. Con el golpe de estado el imperio ha querido mandar un mensaje claro y contundente a los países de América latina, recordándonos que son ellos, los que, de alguna manera siguen ejerciendo un control sobre los ejércitos y que las burguesías locales siempre se prestan a las maniobras y políticas imperiales en la zona.
Y, es precisamente esa ecuación la que ha llevado a “gorileti”(alias Michelleti), a abrirle la jaula a los gorilas que parecían dormir en Honduras, han despertado y han salido con las mismas políticas represivas de antaño y, con las mismas consignas y discursos de otra época que parecían que se habían quedado ya en las cloacas de esa oscura historia del continente. Ahora, sin embargo, nos recuerdan que están y siguen ahí. Lo que se está viviendo en estos momentos Honduras y según sea el desenlace final, determinará el camino que debe seguir nuestra única y patria grande Abya Yala.
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Honduras en la encrucijada, ahí se juega todo.
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Por fin los gringos, parece, que se han salido con la suya. Lo han estado intentando desde hace años ( aunque no lo digan ni lo reconozcan abiertamente) sobre los intentos o amagos de “golpes de estado” en el Sur del continente. Ellos, los gringos, están por derrocar a aquellos presidentes latinoamericanos que no obedecen sus lineamientos políticos y, a quienes muchas veces, consideran “nacionalistas progres”; lo intentaron en el 2002 con Chávez en Venezuela, Bolivia, Ecuador. El golpe de Estado en Honduras recuerda aquel que tuvo lugar en Haití, en 2004, contra el presidente Jean-Bertrand Aristide: secuestro en plena madrugada por soldados encapuchados y “aparición” de una carta de renuncia.
Las burguesías latinoamericanas acostumbradas a hacer lo que se les atoja con la ayuda de los gringos, no quieren que sus privilegios se les vaya de las manos. Así pues, las burguesías locales – y lacayas -, continúan creando inestabilidad en los Países donde no gobiernan. Detrás, están los norteamericanos con sus financiaciones a organismos fantasmas, o, a través de sus empresas gringas y/o a las empresas de las burguesías locales. Los pasos que siguen, casi siempre, en los golpes de estado, son los mismos. Ahora sin embargo, cubren sus intentonas golpistas con movilizaciones “dizque” populares, así lo hicieron en Ucrania y su bufanda naranja. Recientemente en Irán con el lazo verde, y lo estamos viendo ahora en Honduras, la burguesía y su “gorilleti” (alias Michelleti), el color blanco.
Esta vez ha sido en Honduras. Y era de esperar. Recientemente, fue este país - y en la ciudad de San Pedro Sula - donde al Imperio yanqui se le asestó un duro golpe político e ideológico. Haciendo que el orden “democrático” (que nunca ha existido) por fin se instalara en la OEA. Quitando el artículo por el cual se le expulsa a Cuba. Quizá sea esta una de las razones por la que los gringos y la CIA junto a las fuerzas armadas y la burguesía Hondureña planificaron el Golpe este golpe de estado. Otra de las razones es que Honduras sea el país más débil de la alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
Volviendo a los métodos de represión y control de años atrás.
En los años ochenta los gringos utilizaron este territorio - con la venia de la burguesía y las fuerzas armadas - como la policía centroamericana. Ellos, debían de vigilar y controlar a los “comunistas” de Guatemala, El Salvador y Nicaragua. Con las bases militares impuestas a ese país centroamericano, la represión, los secuestros y asesinatos a dirigentes populares y sindicales para acabar con los movimientos de izquierdas, era el pago de Honduras, para que recibieran loores de los gringos. Su ejército, la policía y la burguesía se encargaron de mantener a la población hondureña bajo control, para ello se valieron de los escuadrones de la muerte. Sólo de esa manera se garantizaba meterle miedo a la población por un lado, y por el otro convertir a los hondureños en “policías” que debían de ejercer un control a sus mismos compatriotas y a sus países vecinos y rebeldes.
La represión policial fue de tal envergadura que en pocos años acabaron con el movimiento popular y sus líderes. Se estableció así un férreo control policial sobre la población. Aunque fue a Nicaragua a quien se le agredió desde Honduras, con la “Contra”, financiada por los usamericano para lograrlo había de contar con el compadrazgo burgués de ese país. Durante la revolución sandinista en Nicaragua, Washington utilizó Honduras como base de retaguardia de las bandas contrarrevolucionarias. Bajo la dirección de John Negroponte, la embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa se convirtió en cuartel general de los «contras» nicaragüenses y de sus escuadrones de la muerte. Transcurridos los años, y, una vez finalizada la guerra e el Salvador, Guatemala, y antes Nicaragua. “Caído” el muro de Berlín y el inesperado desmembramiento de la URSS, parecía que las cosas iban a cambiar.
Todos estamos observando los cambios que se vienen dando en América latina…, Honduras también se ha sumado a esos cambios. Fue precisamente un presidente salido de la misma burguesía hondureña el que propuso cambios desde el gobierno para intentar palear y mejorar las condiciones de vida de sus compatriotas, y, es esto lo que no le perdonan la burguesía y el ejército.
Honduras en la encrucijada.
Han pasado los años de la guerra fría pero la burguesía hondureña sigue pensando que este mundo no ha cambiado. Creen que pueden convencer con sus argumentos trasnochados y fascistas a una población que por fin ha despertado. El status quo no quiere que el pueblo pobre hondureño tome las riendas de su destino, y, esta es otra de las razones por la que los gringos han apoyado este Golpe. Eso sí, ellos creían que el pueblo hondureño no iba a responder saliendo a las calles para exigir el regreso de su presidente Zelaya. Creían que, como en los ochenta el pueblo hondureño iba a “someterse” o seguirían las consignas dictadas por el gobierno de facto, pero se han equivocado.
La población de Honduras ha despertado y ahora son conscientes de que deben de ser sujetos de su historia. También el pueblo, se ha dado cuenta que ellos, sí, pueden cambiar la historia del País, que son ellos, precisamente los que eligen o no a su gobernantes. Algo ha cambiado en la población de honduras y lo vemos en las calles a pesar de las amenazas, la represión y los asesinatos…, la burguesía, el ejército y los gringos se han equivocado en el análisis al ahora de llevar a la práctica el golpe de Estado. Creían que el pueblo seguía viviendo como en la década de los ochenta pero se han equivocado.
Este golpe era – y es – un mensaje claro a todo el continente latinoamericano y más a aquellos países que están por la vía de los cambios sociales, y más concretamente a los miembros del ALBA. Con el golpe de estado el imperio ha querido mandar un mensaje claro y contundente a los países de América latina, recordándonos que son ellos, los que, de alguna manera siguen ejerciendo un control sobre los ejércitos y que las burguesías locales siempre se prestan a las maniobras y políticas imperiales en la zona.
Y, es precisamente esa ecuación la que ha llevado a “gorileti”(alias Michelleti), a abrirle la jaula a los gorilas que parecían dormir en Honduras, han despertado y han salido con las mismas políticas represivas de antaño y, con las mismas consignas y discursos de otra época que parecían que se habían quedado ya en las cloacas de esa oscura historia del continente. Ahora, sin embargo, nos recuerdan que están y siguen ahí. Lo que se está viviendo en estos momentos Honduras y según sea el desenlace final, determinará el camino que debe seguir nuestra única y patria grande Abya Yala.
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LQSomos. Txanba Payés. Julio de 2009.
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Un golpe para callar al pueblo hondureño
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LQSomos/13/07/2009
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