Irán controla y se blinda: El golpe "reformista" decae y la prensa internacional se quedó sin libreto

La guerra por otras vías

Como primera medida para aislar y matar al virus, los halcones iraníes legitimados en las urnas decretaron cuarentena y se blindaron. Teherán cerró las fronteras: Nada de Internet, nada de "prensa internacional" USA-UE, nada de cronistas "objetivos" operando desde adentro , nada de "derechos humanos" de la CIA, nada de manipulación con imágenes acompañadas de testimonios golpistas, Teherán decidió aplicar cirugía mayor: hay que parar la infección antes de que se torne incontrolable. Teherán controla, y la operación "caballo de troya" se quedó sin su sustento operativo mayor: La prensa internacional sionista tiene que "contar el partido" sin estar adentro de la cancha.
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Informe especial
IAR Noticias
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Presidente de Irán Mahmud Ahmadineyad

Teherán controla con mano dura, y a los golpistas sólo les queda filtrar (cuando pueden) "mensajitos de texto" e imágenes distorsionadas por Internet.

En consecuencia, no hay "cobertura especial", no hay show mediático con la "represión", no hay proclamas desestabilizadoras en terreno, y los propios golpistas ofician de cronistas imberbes (sin experiencia) filtrando fotos y todo tipo de versiones, pero eso no alcanza.

Se necesita garra, experiencia, cintura "periodística", para manipular "informando". Y fuera del teatro de operaciones, a la vieja guardia mediática de la CNN, de la BBC y del resto de las agencias y cadenas europeas y estadounidenses solo les queda "analizar" (justamente lo que no saben) y hacer literatura fantástica con el "fraude".

Ya les pasó en Bielorusia, Kazajstán, Uzbekistán, Birmania, Tibet, Sudán, donde los gobiernos sometidos al "golpe democrático" los dejaron afuera, cerraron las fronteras y se dedicaron a exterminar el virus de la "insurrección popular" made in USA-UE antes de que desate una pandemia.

Después de la operación de cuarentena con cierre de fronteras internas, nadie sabe con certeza lo que pasa en Irán. Ningún analista del sistema (al menos que sea adivino) puede saber en que estado de desarrollo de encuentra el virus de la sedición golpista.

Algunos medios árabes sostienen que los servicios de inteligencia, milicianos y fuerzas de elite islámicas iniciaron el martes una maniobra cerrojo destinada aislar y detectar los focos de contagio golpistas en las universidades y en los centros habituales de desplazamiento de la clase media "reformista".

Los "mensajitos de texto" por Internet hablan de operaciones comandos y razzias con detenciones y más de 60 muertos, realizadas entre estudiantes y militantes políticos de la "revolución reformista".

La información por Internet (fragmentada y sin ilación) habla de detenciones y de decenas de muertos que superan a los de las sublevaciones estudiantiles de 1999 y 2003, donde muchos de los cabecillas fueron fusilados y exterminados durante los procedimientos.

El martes, bajó la intensidad de la represión callejera como consecuencia de que bajaron las provocaciones, pero -dicen las usinas golpistas por Internet-& se incrementaron a grados notables los procedimientos y acciones encubiertas para dejar a las revueltas descabezadas y sin comando central.

Hay que aclarar que la CIA y los servicios occidentales no actúan en Irán (o en cualquier otro teatro de conflicto) con uniforme o con credencial, ni siquiera con agentes extranjeros, sino que operan con iraníes, que se visten como iraníes y hablan como iraníes, infiltrados entre los golpistas "reformistas".

A estos topos del "virus insurreccional" buscan noche y día los servicios de inteligencia y los gurcas de la revolución iraní en versión escrita y registrada por el régimen islámico que controla la República de Irán.

Y como en cualquier operación militar de estas características el axioma que guía a los torpedos de Ahmadineyad es: "Muerto el perro se acabó la rabia".

El encriptamiento de la información oficial (por razones obvias) convierte a la represión del motín en un juego de acertijos, y desata los "análisis" más disparatados de la prensa sionista internacional que se quedó sin la "mercadería" de los acontecimientos para manipular.

Los presidentes y funcionarios de las potencias sionistas (que habitualmente encienden el firmamento de las protestas golpistas con sus declaraciones), esta vez, desde Obama para abajo, han resuelto mantener "perfil bajo".

Ahmadineyad, agrandado por el triunfo electoral arrasador, se encargó de advertirles el lunes: "Ninguna potencia está en condiciones de amenazar a Irán".

Y lo ratificó el martes: "Les advertimos que no se metan en los asuntos internos de Irán".

Está claro: Irán no es Birmania ni Sudán, controla la llave del 40% del petróleo mundial, juega en las grandes ligas de la guerra intercapitalista por los recursos estratégicos del planeta junto a Rusia y China, y las potencias sionistas piensan dos veces antes de ver el Golfo Pérsico convertido en llamas.

Jóvenes pertenecientes a la a Guardia Revolucionaria de Irán, la unidad de élite militar.
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En consecuencia, Irán está en cuarentena y lo que pasa adentro es una cuestión de "asuntos internos".

La prensa internacional, sin ingreso a ninguna fuente, solo repite como loro la información que le pasa el comando político reformista que perdió la elección, cuyos dirigentes ya comenzaron -según las agencias internacionales- a >tomar distancia de las revueltas para salvar el pellejo.

Citado por varias agencias internacionales, el derrotado candidato presidencial Mir Hosein Musavi pidió a sus partidarios que este miércoles se manifiesten "pacíficamente" o acudan a las mezquitas para expresar su solidaridad con las personas que han sufrido "martirio" en los disturbios posteriores a las elecciones presidenciales del pasado viernes.

"Muchos de nuestros compatriotas han resultado heridos o han sufrido el martirio", declaró Musavi en un comunicado difundido este miércoles por su página de Internet. "Pido al pueblo que exprese su solidaridad con sus familias acudiendo juntos a las mezquitas o participando en manifestaciones pacíficas", a las que, precisó, podría acudir él en persona.

Un "santo varón", Musavi, el hombre que sirvió de "chispa" a la insurrección golpista cuando después de anunciarse el triunfo electoral de Ahmadineyad denunció "fraude" y solicitó la anulación de los comicios.

¿Se les está yendo la mano a los ayatolas con la represión? Depende del ángulo del cual se mire.

Para los golpistas y sus usinas político-mediáticas, lo que está sucediendo en Irán se llama "represión", del lado de los perjudicados (en este caso el régimen iraní) se llama "exterminio del enemigo".

Y "exterminar al enemigo" (léase poblaciones indefensas) es lo que hacen los yanquis, Israel y las potencias sionistas europeas en Irak, Afganistán, Pakistán, Gaza,Sri Lanka, y, en general, donde existan "terroristas" que se opongan a los intereses estratégicos del "occidental" capitalismo trasnacional organizado en banda para depredar el planeta.

Una cosa es el decálogo rosado de la "democracia", los "derechos humanos" y el "pacifismo" declamados para manipular y achicar cerebros masivos, para dominar y someter pueblos sin las armas, y otra cosa es ponerse el uniforme y combatir para conseguir los objetivos en el teatro de operaciones.

La "democracia" sólo sirve para ganar elecciones y mantener el dominio sin el uso de las armas, pero no sirve para ganar ninguna guerra por consecución de objetivos en el teatro de operaciones de la realidad mundial.

Nadie pelea una guerra con la "democracia, sino que lo hace con armas, organización y estrategias de combate para controlar, someter o matar al enemigo antes de que éste haga lo mismo.

El Imperio USA-UE+Israel, declama (y demanda al mundo) "democracia y derechos humanos" solo para la prensa y los foros internacionales, pero, a la hora de la acción, de defender sus intereses imperiales estratégicos, actúan (y bombardean) con la lógica pragmática de los aviones, tanques, barcos y misiles de última generación.

El Imperio sionista se resume en una idea fuerza: Vendemos "democracia y derechos humanos" para afuera, adentro, solo consumimos operaciones militares para exterminar al enemigo y evitar que su ejemplo se propague.

¿Doble discurso? Nada de eso, solo estrategia de doble vuelta.

A los ayatolas iraníes, guerreros de profesión, el jueguito no les cabe.

Y están haciendo lo que tienen que hacer: Exterminar el virus, antes de que se convierta en pandemia.

Como diría Clausewitz: Se trata de la guerra estúpido

IAR/19/06/2009