Panamá atento a decisión norteamericana sobre Noriega
Leonel Nodal
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Panamá-Los panameños aguardan hoy, con mayor o menor interés, preocupación o curiosidad, la decisión que tomará un juez norteamericano respecto a lo pedidos de extradición a Francia o repatriación a Panamá de Manuel Antonio Noriega.
Cualquier otro título para identificarlo, además de su nombre, resulta ocioso, por lo menos aquí, donde basta decir o escribir "MAN", y ya se sabe de quien se trata, y no por ser sus iniciales, sino porque también le decían "el man", en inglés "el hombre".
Eso, el hombre que dominó la política de Panamá entre 1983 y 1989, el jefe de las desaparecidas Fuerzas de Defensa, el ex general apresado por la fuerza invasora de Estados Unidos, a quien condujeron encadenado a Miami y condenaron a 40 años de prisión.
Por su buena conducta en prisión, Manuel Antonio Noriega vio reducido a 17 años el castigo impuesto por colaborar con el tráfico de drogas hacia Estados Unidos, y ahora tiene marcada la salida de prisión para el 9 de septiembre.
A sólo dos semanas del día fijado para su excarcelación, el juez William Hoeveler debe hacer pública su decisión en Miami, sobre si Manuel Antonio Noriega es un prisionero de guerra.
Por esas ironías del destino, fue Hoeveler quien hizo valer esa condición en el juicio de 1990, y ahora los abogados de Noriega demandan su repatriación, en virtud de la Convención de Ginebra.
Francia reclama al MAN para hacerlo cumplir 10 años por blanqueo de capitales y en Panamá lo aguardan por lo menos dos condenas a 20 años, por homicidios juzgados en ausencia.
La Procuradora General de la República, Ana Matilde Gómez, dijo que Noriega, de 72 años, pudiera cumplir su condena en casa.
Un amigo anónimo mandó a pintar su antigua vivienda, realmente en estado inhabitable, pero la ministra de Gobierno Olga Gólcher dijo que irá al centro penitenciario El Renacer.
Este viernes se sabrá si el MAN será llevado a Francia o si volverá a Panamá, donde su sola mención provoca ocultas simpatías, rencores, escalofríos, nerviosismo y hasta intolerables jaquecas./lam ln
Panamá-Los panameños aguardan hoy, con mayor o menor interés, preocupación o curiosidad, la decisión que tomará un juez norteamericano respecto a lo pedidos de extradición a Francia o repatriación a Panamá de Manuel Antonio Noriega.
Cualquier otro título para identificarlo, además de su nombre, resulta ocioso, por lo menos aquí, donde basta decir o escribir "MAN", y ya se sabe de quien se trata, y no por ser sus iniciales, sino porque también le decían "el man", en inglés "el hombre".
Eso, el hombre que dominó la política de Panamá entre 1983 y 1989, el jefe de las desaparecidas Fuerzas de Defensa, el ex general apresado por la fuerza invasora de Estados Unidos, a quien condujeron encadenado a Miami y condenaron a 40 años de prisión.
Por su buena conducta en prisión, Manuel Antonio Noriega vio reducido a 17 años el castigo impuesto por colaborar con el tráfico de drogas hacia Estados Unidos, y ahora tiene marcada la salida de prisión para el 9 de septiembre.
A sólo dos semanas del día fijado para su excarcelación, el juez William Hoeveler debe hacer pública su decisión en Miami, sobre si Manuel Antonio Noriega es un prisionero de guerra.
Por esas ironías del destino, fue Hoeveler quien hizo valer esa condición en el juicio de 1990, y ahora los abogados de Noriega demandan su repatriación, en virtud de la Convención de Ginebra.
Francia reclama al MAN para hacerlo cumplir 10 años por blanqueo de capitales y en Panamá lo aguardan por lo menos dos condenas a 20 años, por homicidios juzgados en ausencia.
La Procuradora General de la República, Ana Matilde Gómez, dijo que Noriega, de 72 años, pudiera cumplir su condena en casa.
Un amigo anónimo mandó a pintar su antigua vivienda, realmente en estado inhabitable, pero la ministra de Gobierno Olga Gólcher dijo que irá al centro penitenciario El Renacer.
Este viernes se sabrá si el MAN será llevado a Francia o si volverá a Panamá, donde su sola mención provoca ocultas simpatías, rencores, escalofríos, nerviosismo y hasta intolerables jaquecas./lam ln
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Prensa Latina - Cuba/25/08/2007
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