Más de 2000 argentinos que viven en el exterior realizan tareas solidarias en el país
Embajadores sociales
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La ONG Help Argentina que funciona como puente entre donantes de todo el mundo y la Argentina, distinguió a 5 embajadores sociales. Los premiados fueron seleccionados de una lista de 79 nominados. Desde distintos rincones del mundo, miles de argentinos se organizan y hacen llegar su ayuda al país. Historias de solidaridad, compromiso y empuje. Muchos emigraron cuando las cosas se pusieron difíciles en la Argentina y no volvieron más. Pero sintieron que debían devolverle al país todo lo que él les había dado. Y cada uno, aunque desde distintos rincones del mundo, sigue estando: se juntan, se organizan, juntan plata y mercadería, y la envían para ayudar a los que menos tienen en su país natal.Son los más de 2000 embajadores sociales argentinos que ayudan desde el exterior a través de la ONG Help Argentina. Cinco de ellos fueron reconocidos ayer por esta organización civil, a través de una distinción que entrega desde hace dos años, para recompensar, de alguna manera, la tarea solidaria que realizan. Agustina Blanco, Rubén Pensa, Hernán Silva y Miriam Mansilla fueron los argentinos premiados; el padre Liam Hayes recibió una mención especial, pese a que es irlandés, por fundar tres organizaciones en la Argentina, para ayudar a personas en situaciones difíciles.“Es una forma de reconocer a embajadores anónimos, que son un ejemplo concreto y real. Al exponer lo que hacen, sirve como incentivo para todas aquellas personas que creen que ayudar es una tarea complicada o que ellas no pueden hacer nada”, explica Milagros Olivera, Directora Ejecutiva de Help Argentina.Esta organización sin fines de lucro tiene como misión fortalecer a las organizaciones de la sociedad civil argentina, a través de la movilización de donantes y voluntarios. Funciona como un puente entre una comunidad de donantes y voluntarios de todas partes del mundo y el sector social argentino. Help Argentina cuenta hoy con más de 250 voluntarios, movilizados a través del programa de voluntariado Insight Argentina.Por ello, cada año entregan un premio a los embajadores sociales más destacados del año. Para elegirlos cuentan con la nominación que hace la gente desde distintas partes del mundo. “Este año recibimos 150 nominaciones a través de Internet, y fueron 79 los nominados”, cuenta Olivera. De esa cantidad, un comité interno de Help Argentina, que analizó cada una de las historias de solidaridad que provienen del exterior, eligió a 17 finalistas, teniendo en cuenta 3 criterios: compromiso, impacto e innovación.Fueron dos las categorías de los nominados: “Contra viento y marea”, compuesta por personas que trabajan en forma independiente; y “Líder social”, que trabajan en un espacio integrado por otros argentinos y amigos de la Argentina. Luego, un jurado especialmente seleccionado, eligió las dos historias más impactantes de cada categoría para entregarles el Premio Help Argentina 2007: Blanco y Pensa ganaron como miembros de la primera categoría, mientras que Silva y Mansilla fueron los distinguidos de la segunda. Pero hubo una quinta distinción, para el padre Hayes, “y fue especial, porque el jurado entendió que se lo merecía”, según explica Olivera, también miembro del jurado.De la ceremonia de entrega de premios participaron Agustín Pichot y Felipe Contempomi, jugadores del seleccionado argentino de Rugby, Los Pumas, quienes también viven en el exterior y, desde allí, ayudan a los que menos tienen en su país. También participó Cecilia Baccigalupo, campeona argentina de padle y creadora de la Fundación Deporte para Personas con Discapacidad. Los tres deportistas entregaron remeras de la selección argentina a los familiares de los premiados, que asistieron para recibir la distinción en lugar de los galardonados que se encuentran en el exterior.Help Argentina se fundó en 2003, pero empezó a gestarse en 2002, durante el peor momento de la última crisis económica del país, que llevó a muchos argentinos a emigrar a otros países, en busca de una oportunidad mejor. “Empezamos a hacer de puente entre los argentinos que se iban y querían ayudar (favorecidos por el cambio de la moneda), y los que se quedaban”, relata Olivera.Las historias: un premio, un ejemploHernán Silva es uno de los embajadores sociales nominados. Tiene 28 años, y hace 6 vive en Chicago, Estados Unidos. Desde allí creó el grupo Argentina Chicago, con el fin de juntar fondos para ayudar a escuelas del interior de la Argentina, y construir algunas en aquellos lugares donde faltan. Ayer fue uno de los distinguidos por Help Argentina. Infocívica dialogó telefónicamente con él.Para construir las escuelas, Hernán también creó otra organización, llamada Creando Escuelas. Y ya son dos las que se construyeron gracias a los fondos juntados por Chicago Argentina. Ambas en Chaco: una en medio del monte chaqueño, otra en el pueblo Pampa India, a dos horas de Resistencia. “Ahora los chicos que antes viajaban tres horas en mula para llegar a la escuela más cercana tienen un lugar donde estudiar cerca de sus casas”, cuenta Hernán. Argentina-Chicago también recolecta ropa y alimentos para enviar al país, a través de colectas. La iniciativa surgió en una reunión de argentinos en Chicago. “Empezamos juntándonos en bares, para mantener nuestros lazos. Y luego pensamos: En vez de gastar plata en un bar, ¿por qué no organizar fiestas y recaudar fondos para ayudar a nuestro país?”, relata.La inquietud de solidarizarse con los demás le surgió a Hernán cuando comenzó la crisis de 2001. “Hacía un año que había dejado el país, y sentí que debía retribuirle de alguna manera. La Argentina me dio lo que soy”, asegura. Y cuenta que él se enteraba de la crisis económica a través de Internet y de la televisión, pero que no terminaba de darse cuenta de la gravedad de la situación hasta que viajó al país y se topó con la realidad. “Todo lo que uno piensa para ayudar es muy distinto cuando uno va al lugar y entiende de qué se trata. Eso me pasó cuando llegué a Chaco”, destaca.Además de las fiestas, Argentina Chicago organiza otro tipo de eventos para recaudar dinero, como sorteos y rifas. Su ayuda llega directamente a la Agentina, sin intermediarios. Para ello, Hernán se tomó el trabajo de viajar, recorrer el Chaco, detectar las necesidades de su gente, averiguar precios, buscar presupuestos, y asegurarse que el destino del dinero recaudado llegaría sin inconvenientes.Agustina Blanco es otra de las distinguidas. Tiene 39 años y vive en Estados Unidos desde 1990. Tiene un Master en Educación y apoyó una escuela rural en Las Lomitas, provincia de Formosa, incluyendo un rediseño del plan de estudios, capacitaciones y pago de sueldos a los maestros y recaudación de fondos para infraestructura. Su mamá, Mónica Etchegaray, cuenta que el afán de su hija por ayudar en el país surgió después del atentado a las Torres Gemelas, el 11 de septiembre de 2001. “El hermano de un amigo suyo, argentino, murió en esa oportunidad, y ella, para contener a su amigo, empezó a ayudarlo con un proyecto solidario que él tenía en Las Lomitas”, relata Mónica, quien recibió el premio en nombre de su hija.Desde un hogar que creó en Suiza, donde vive desde hace seis años, Rubén Pensa, cordobés, ayuda a su provincia natal y a organizaciones de Santa Fe. Además, patrocina en Suiza la cultura latinoamericana, ayudando a artistas para hacer eventos, como presentaciones y ferias artísticas. Creó el Córdoba Nexo Enfants-Suiza.El cuarto premio fue para Mirian Mansilla. Tiene 51 años y nació en Santa Fe. Ahora vive en Italia desde hace 23 años. Comenzó impulsando un comedor para niños carenciados en Garín, provincia de Buenos Aires, y sus esfuerzos se cristalizaron en Mateando Onlus, una ONG que trabaja en favor de la Argentina.La distinción especial, por último, fue para el padre Hayes, un irlandés que la mitad del año vive en Oberá, Misiones. Con sus tres organizaciones en la Argentina, ayuda desde 1989 a ancianos abandonados por sus familias y a personas humildes que necesitan servicio médico. Recauda fondos desde Irlanda para estas organizaciones.
Para mayor información, comunicarse a Help Argentina al 5032-6424, o ingresar a su página
web www.helpargentina.org.
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168 Horas-Argentina/Inicio/24/07/2007
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La ONG Help Argentina que funciona como puente entre donantes de todo el mundo y la Argentina, distinguió a 5 embajadores sociales. Los premiados fueron seleccionados de una lista de 79 nominados. Desde distintos rincones del mundo, miles de argentinos se organizan y hacen llegar su ayuda al país. Historias de solidaridad, compromiso y empuje. Muchos emigraron cuando las cosas se pusieron difíciles en la Argentina y no volvieron más. Pero sintieron que debían devolverle al país todo lo que él les había dado. Y cada uno, aunque desde distintos rincones del mundo, sigue estando: se juntan, se organizan, juntan plata y mercadería, y la envían para ayudar a los que menos tienen en su país natal.Son los más de 2000 embajadores sociales argentinos que ayudan desde el exterior a través de la ONG Help Argentina. Cinco de ellos fueron reconocidos ayer por esta organización civil, a través de una distinción que entrega desde hace dos años, para recompensar, de alguna manera, la tarea solidaria que realizan. Agustina Blanco, Rubén Pensa, Hernán Silva y Miriam Mansilla fueron los argentinos premiados; el padre Liam Hayes recibió una mención especial, pese a que es irlandés, por fundar tres organizaciones en la Argentina, para ayudar a personas en situaciones difíciles.“Es una forma de reconocer a embajadores anónimos, que son un ejemplo concreto y real. Al exponer lo que hacen, sirve como incentivo para todas aquellas personas que creen que ayudar es una tarea complicada o que ellas no pueden hacer nada”, explica Milagros Olivera, Directora Ejecutiva de Help Argentina.Esta organización sin fines de lucro tiene como misión fortalecer a las organizaciones de la sociedad civil argentina, a través de la movilización de donantes y voluntarios. Funciona como un puente entre una comunidad de donantes y voluntarios de todas partes del mundo y el sector social argentino. Help Argentina cuenta hoy con más de 250 voluntarios, movilizados a través del programa de voluntariado Insight Argentina.Por ello, cada año entregan un premio a los embajadores sociales más destacados del año. Para elegirlos cuentan con la nominación que hace la gente desde distintas partes del mundo. “Este año recibimos 150 nominaciones a través de Internet, y fueron 79 los nominados”, cuenta Olivera. De esa cantidad, un comité interno de Help Argentina, que analizó cada una de las historias de solidaridad que provienen del exterior, eligió a 17 finalistas, teniendo en cuenta 3 criterios: compromiso, impacto e innovación.Fueron dos las categorías de los nominados: “Contra viento y marea”, compuesta por personas que trabajan en forma independiente; y “Líder social”, que trabajan en un espacio integrado por otros argentinos y amigos de la Argentina. Luego, un jurado especialmente seleccionado, eligió las dos historias más impactantes de cada categoría para entregarles el Premio Help Argentina 2007: Blanco y Pensa ganaron como miembros de la primera categoría, mientras que Silva y Mansilla fueron los distinguidos de la segunda. Pero hubo una quinta distinción, para el padre Hayes, “y fue especial, porque el jurado entendió que se lo merecía”, según explica Olivera, también miembro del jurado.De la ceremonia de entrega de premios participaron Agustín Pichot y Felipe Contempomi, jugadores del seleccionado argentino de Rugby, Los Pumas, quienes también viven en el exterior y, desde allí, ayudan a los que menos tienen en su país. También participó Cecilia Baccigalupo, campeona argentina de padle y creadora de la Fundación Deporte para Personas con Discapacidad. Los tres deportistas entregaron remeras de la selección argentina a los familiares de los premiados, que asistieron para recibir la distinción en lugar de los galardonados que se encuentran en el exterior.Help Argentina se fundó en 2003, pero empezó a gestarse en 2002, durante el peor momento de la última crisis económica del país, que llevó a muchos argentinos a emigrar a otros países, en busca de una oportunidad mejor. “Empezamos a hacer de puente entre los argentinos que se iban y querían ayudar (favorecidos por el cambio de la moneda), y los que se quedaban”, relata Olivera.Las historias: un premio, un ejemploHernán Silva es uno de los embajadores sociales nominados. Tiene 28 años, y hace 6 vive en Chicago, Estados Unidos. Desde allí creó el grupo Argentina Chicago, con el fin de juntar fondos para ayudar a escuelas del interior de la Argentina, y construir algunas en aquellos lugares donde faltan. Ayer fue uno de los distinguidos por Help Argentina. Infocívica dialogó telefónicamente con él.Para construir las escuelas, Hernán también creó otra organización, llamada Creando Escuelas. Y ya son dos las que se construyeron gracias a los fondos juntados por Chicago Argentina. Ambas en Chaco: una en medio del monte chaqueño, otra en el pueblo Pampa India, a dos horas de Resistencia. “Ahora los chicos que antes viajaban tres horas en mula para llegar a la escuela más cercana tienen un lugar donde estudiar cerca de sus casas”, cuenta Hernán. Argentina-Chicago también recolecta ropa y alimentos para enviar al país, a través de colectas. La iniciativa surgió en una reunión de argentinos en Chicago. “Empezamos juntándonos en bares, para mantener nuestros lazos. Y luego pensamos: En vez de gastar plata en un bar, ¿por qué no organizar fiestas y recaudar fondos para ayudar a nuestro país?”, relata.La inquietud de solidarizarse con los demás le surgió a Hernán cuando comenzó la crisis de 2001. “Hacía un año que había dejado el país, y sentí que debía retribuirle de alguna manera. La Argentina me dio lo que soy”, asegura. Y cuenta que él se enteraba de la crisis económica a través de Internet y de la televisión, pero que no terminaba de darse cuenta de la gravedad de la situación hasta que viajó al país y se topó con la realidad. “Todo lo que uno piensa para ayudar es muy distinto cuando uno va al lugar y entiende de qué se trata. Eso me pasó cuando llegué a Chaco”, destaca.Además de las fiestas, Argentina Chicago organiza otro tipo de eventos para recaudar dinero, como sorteos y rifas. Su ayuda llega directamente a la Agentina, sin intermediarios. Para ello, Hernán se tomó el trabajo de viajar, recorrer el Chaco, detectar las necesidades de su gente, averiguar precios, buscar presupuestos, y asegurarse que el destino del dinero recaudado llegaría sin inconvenientes.Agustina Blanco es otra de las distinguidas. Tiene 39 años y vive en Estados Unidos desde 1990. Tiene un Master en Educación y apoyó una escuela rural en Las Lomitas, provincia de Formosa, incluyendo un rediseño del plan de estudios, capacitaciones y pago de sueldos a los maestros y recaudación de fondos para infraestructura. Su mamá, Mónica Etchegaray, cuenta que el afán de su hija por ayudar en el país surgió después del atentado a las Torres Gemelas, el 11 de septiembre de 2001. “El hermano de un amigo suyo, argentino, murió en esa oportunidad, y ella, para contener a su amigo, empezó a ayudarlo con un proyecto solidario que él tenía en Las Lomitas”, relata Mónica, quien recibió el premio en nombre de su hija.Desde un hogar que creó en Suiza, donde vive desde hace seis años, Rubén Pensa, cordobés, ayuda a su provincia natal y a organizaciones de Santa Fe. Además, patrocina en Suiza la cultura latinoamericana, ayudando a artistas para hacer eventos, como presentaciones y ferias artísticas. Creó el Córdoba Nexo Enfants-Suiza.El cuarto premio fue para Mirian Mansilla. Tiene 51 años y nació en Santa Fe. Ahora vive en Italia desde hace 23 años. Comenzó impulsando un comedor para niños carenciados en Garín, provincia de Buenos Aires, y sus esfuerzos se cristalizaron en Mateando Onlus, una ONG que trabaja en favor de la Argentina.La distinción especial, por último, fue para el padre Hayes, un irlandés que la mitad del año vive en Oberá, Misiones. Con sus tres organizaciones en la Argentina, ayuda desde 1989 a ancianos abandonados por sus familias y a personas humildes que necesitan servicio médico. Recauda fondos desde Irlanda para estas organizaciones.
Para mayor información, comunicarse a Help Argentina al 5032-6424, o ingresar a su página
web www.helpargentina.org.
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168 Horas-Argentina/Inicio/24/07/2007
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