Chávez niega ser el nuevo "FMI" de Latinoamérica
El presidente Chávez, rechazó hoy las críticas que lo señalan como "el nuevo Fondo Monetario Internacional" de la región y cobrar intereses superiores a los organismos financieros internacionales
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El presidente venezolano negó dichas acusaciones en la reciente compra de 500 millones de dólares en bonos de la deuda argentina. En un comunicado enviado por la presidencia, Chávez desechó las acusaciones exclamando: "Dios me libre, por favor!" de asumir ese papel. El mandatario dijo que Venezuela compró los bonos que le ofreció Argentina y que ese país "en definitiva es el que fija el monto del interés al papel". "Yo dudo mucho de que sea cierto que esos intereses sean más altos que los altísimos intereses, no sólo económicos, sino sociales, políticos, y el grave daño que le hizo el Fondo Monetario Internacional a Venezuela, a Argentina y a toda la América Latina", afirmó Chávez. Según reseñas de la prensa local, opositores argentinos cuestionaron la operación entre los dos gobiernos porque, -aseguraron- Venezuela estaría cobrando 11 por ciento de intereses sobre el monto de los bonos, mientras que el FMI, aplica tasas del 5 por ciento. El presidente Chávez respondió hoy que la compra de bonos argentinos "es resultado de la decisión de abrir un nuevo canal de cooperación con Argentina mediante un mecanismo alternativo y liberador a los mecanismos del Fondo Monetario Internacional". El presidente añadió que la operación financiera "luego resulta que es un negocio también, pero no fue planificado como un negocio, sólo como producto de la complementación". Analistas locales explican que los títulos adquiridos a Argentina, que con esta emisión suman 5.147 millones de dólares en tres años, son colocados en el mercado venezolano donde resultan atractivos para los inversionistas como un instrumento para acceder a dólares, en medio de un estricto control cambiario. Los títulos resultan atractivos porque se venden en dólares preferenciales (a un cambio de 2.150 bolívares por dólar) dándole un amplio margen de ganancia tanto al gobierno como a los inversionistas ya que la diferencia entre el dólar oficial y el no regulado (cotizado a más de 4.200 bolívares) supera el 100 por ciento. Chávez rechazó además las críticas de "sesudos analistas" a la venta de petróleo venezolano al gobierno de Néstor Kirchner, las cuales atribuyó a que "preferirían que Argentina se amarrara otra vez al carro mortal del Fondo Monetario Internacional". "Vaya qué caro le costó a Argentina amarrarse a ese carro mortal!", enfatizó Chávez. El presidente venezolano concluyó que "difícilmente puede haber algo más caro para un pueblo que los convenios con el Fondo Monetario". /ANSA
El presidente venezolano negó dichas acusaciones en la reciente compra de 500 millones de dólares en bonos de la deuda argentina. En un comunicado enviado por la presidencia, Chávez desechó las acusaciones exclamando: "Dios me libre, por favor!" de asumir ese papel. El mandatario dijo que Venezuela compró los bonos que le ofreció Argentina y que ese país "en definitiva es el que fija el monto del interés al papel". "Yo dudo mucho de que sea cierto que esos intereses sean más altos que los altísimos intereses, no sólo económicos, sino sociales, políticos, y el grave daño que le hizo el Fondo Monetario Internacional a Venezuela, a Argentina y a toda la América Latina", afirmó Chávez. Según reseñas de la prensa local, opositores argentinos cuestionaron la operación entre los dos gobiernos porque, -aseguraron- Venezuela estaría cobrando 11 por ciento de intereses sobre el monto de los bonos, mientras que el FMI, aplica tasas del 5 por ciento. El presidente Chávez respondió hoy que la compra de bonos argentinos "es resultado de la decisión de abrir un nuevo canal de cooperación con Argentina mediante un mecanismo alternativo y liberador a los mecanismos del Fondo Monetario Internacional". El presidente añadió que la operación financiera "luego resulta que es un negocio también, pero no fue planificado como un negocio, sólo como producto de la complementación". Analistas locales explican que los títulos adquiridos a Argentina, que con esta emisión suman 5.147 millones de dólares en tres años, son colocados en el mercado venezolano donde resultan atractivos para los inversionistas como un instrumento para acceder a dólares, en medio de un estricto control cambiario. Los títulos resultan atractivos porque se venden en dólares preferenciales (a un cambio de 2.150 bolívares por dólar) dándole un amplio margen de ganancia tanto al gobierno como a los inversionistas ya que la diferencia entre el dólar oficial y el no regulado (cotizado a más de 4.200 bolívares) supera el 100 por ciento. Chávez rechazó además las críticas de "sesudos analistas" a la venta de petróleo venezolano al gobierno de Néstor Kirchner, las cuales atribuyó a que "preferirían que Argentina se amarrara otra vez al carro mortal del Fondo Monetario Internacional". "Vaya qué caro le costó a Argentina amarrarse a ese carro mortal!", enfatizó Chávez. El presidente venezolano concluyó que "difícilmente puede haber algo más caro para un pueblo que los convenios con el Fondo Monetario". /ANSA
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Cadena Global-Venezuela/13/08/2007
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