6/10/07

COREA: Guerra Fría en el congelador

Análisis de Antoaneta Bezlova
-
BEIJING (IPS) La histórica declaración firmada esta semana por el líder norcoreano Kim Jong Il y el presidente de Corea del Sur, Roh Mooo Hyun, es otro paso hacia el fin formal de la Guerra de Corea y hacia la superación de la desconfianza mutua, vestigio de la Guerra Fría.
La declaración de la cumbre del martes, la segunda celebrada entre los dos países, también invita a Estados Unidos y China, participantes en la guerra de Corea (1950-1953), a ayudar en la redacción de un tratado de paz permanente que reemplace el armisticio de hace 54 años.
Las dos Coreas todavía están técnicamente en guerra, y la zona desmilitarizada --remanente de la guerra, que Roh llamó "pared prohibida"-- divide la península. El ejército estadounidense mantiene aún hoy unos 28.000 efectivos en Corea del Sur.
Además, la declaración fue firmada en la misma semana en que Corea del Norte formuló su compromiso más firme hasta hoy para desmantelar su programa de armas nucleares.
El régimen de Kim Jong Il prometió desactivar el principal complejo de reactores en Yongbyon, 100 kilómetros al norte de Pyongyang, y revelar completamente todas sus operaciones nucleares para fin de año.
China, anfitriona de las conversaciones "de las seis partes" (que incluyen a las dos Coreas, Estados Unidos, Rusia y Japón), aplaudió ambos avances, que, según dijeron sus autoridades, tienden las bases para el establecimiento de una paz permanente en la península.
"China apoya consistentemente los esfuerzos del Norte y del Sur para mejorar las relaciones bilaterales y concretar la reconciliación y la cooperación a través del diálogo", declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores.
"Damos la bienvenida a los resultados positivos de la cumbre y creemos que conducirá al progreso pacífico de la península coreana y a la estabilidad de la región", agregó.
El presidente estadounidense George W. Bush, que había integrado en 2002 a Corea del Norte en el "eje del mal" de países hostiles, valoró el jueves los avances en el proceso de desnuclearización de Pyongyang como un ejemplo para Irán, otro vértice de ese "eje".
Bush manifestó su voluntad de entablar un diálogo directo con Teherán si el régimen islámico congelaba primero su programa de desarrollo nuclear, y agregó que el acuerdo de desarme atómico "asegurará la paz y la prosperidad futuras de la región de Asia nororiental".
Estados Unidos acordó dirigir la desnuclearización norcoreana y a proporcionar el financiamiento inicial. También accedió, ante la demanda de Corea del Norte, eliminar al país asiático de su lista de países que patrocinan el terrorismo.
La declaración de la cumbre excedió las expectativas de los observadores.
El tratado de armas nucleares anunciado en Beijing luego de una ronda de negociaciones de las seis partes reitera un compromiso asumido por Corea del Norte en febrero, de abandonar en principio su programa nuclear a cambio de un millón de toneladas de gasoil pesado, o el equivalente monetario en otro tipo de asistencia.
El acuerdo fue aceptado por las seis partes, a pesar de que Israel aseguró que Corea del Norte puede haber compartido tecnología armamentista con Siria.
Pero la declaración firmada en la cumbre de Pyongyang representa un "sustancial salto adelante", según el experto en asuntos coreanos Li Dunqiu.
"El compromiso de las dos partes a buscar un tratado de paz formal para poner fin a la guerra significa que ambas están dispuestas a sacudirse la Guerra Fría y a trabajar hacia la reconciliación y una eventual reunificación", dijo.
Cuando se anunció la cumbre en agosto, hubo escasa expectativa. Los detractores la describieron como una "estratagema política" del muy impopular presidente surcoreano Roh Moo Hyun con miras a las inminentes elecciones presidenciales. La oposición conservadora, que le llevan la delantera a la centro-izquierda de Roh en las encuestas, criticaron el momento elegido para la cumbre y su ambigua agenda, la cual, advirtieron, hacía improbable lograr más que gestos simbólicos. Para el líder norcoreano Kim Jong Il, acceder a participar en la cumbre --siete años después de su primera, con el entonces presidente surcoreano Kim Dae Jung-- fue visto como una última oportunidad para que su régimen obtuviera concesiones económicas del gobierno de Roh antes de los comicios presidenciales de diciembre.
Las pruebas con armas nucleares realizadas por Corea del Norte el año pasado sembraron el escepticismo en el público sudcoreano hacia la política de "paz y prosperidad" formulada por Roh para su vínculo con Kim Il Sung.
"Al acceder a la cumbre, Kim podría ser visto como recompensando la política de 'paz y prosperidad'. Pero también podría usar la cumbre para dejarle claro a Estados Unidos y Japón que su régimen ya no está tan aislado", dijo en su momento Zhu Feng, experto en relaciones internacionales de la Universidad de Beijing.
Los 23 millones de habitantes de Corea del Norte están aislados y dependen de las partidas racionadas de alimento y combustible que les da el gobierno.
Kim Jong Il es reticente a reformar y abrir la economía, que fue el camino elegido por su vecina China. Corea del Norte sufrió una hambruna devastadora a fines de los años 90 y sigue siendo uno de los países más pobres del mundo.
Sellar un acuerdo de paz con el Sur podría abrir la puerta a las inversiones, a la transferencia de tecnología del exterior y a la reconstrucción de su economía, según expertos.
"Crear una 'comunidad económica conjunta', como desea Roh, podría ser una estrategia beneficiosa para ambas partes. El gradual crecimiento de ambas economías podría servir de base a la eventual reunificación de los dos países", dijo Li Dunqiu.
En la declaración conjunta, el Norte y el Sur "acordaron cooperar cercanamente y poner fin a la hostilidad militar, calmar la tensión y garantizar la paz en la península".
Las dos partes también acordaron trabajar hacia el establecimiento de zonas industriales especiales en el Norte, que usarían mano de obra norcoreana y servirían para mejorar la calidad de vida de la población, además de ayudar a vincular a las dos economías.
-
IPS Noticias - Uruguay/06/10/2007

No hay comentarios:

Locations of visitors to this page