10/4/07

Los Angeles / Reclamos de inmigrantes lejos del plan de Bush


El debate migratorio no es ajeno a las iglesias, muchas de las cuales toman parte activa en la discusión al promover acciones en favor de los indocumentados. En la imagen, un joven salvadoreño participa, junto a su familia, en una “megamarcha” frente al Capitolio en Washington DC, EEUU. (Foto EFE)
Diario Las Américas.com / Inicio / Agencia AFP / 10-04-2007
Por Paula Bustamante

LOS ÁNGELES -- Grupos proinmigrantes alistan para el martes acciones para reclamar una reforma migratoria “justa y no como la de Bush”, que contemple la legalización de indocumentados y la detención de las redadas, a un año de las masivas marchas que recorrieron Estados Unidos. Aunque no han fijado marchas se prevén actos en Nueva York y en Los Angeles, ciudad donde el año pasado llegaron a manifestarse hasta 500.000 personas por la misma causa: en favor de una reforma que cambie la situación de unos 12 millones de indocumentados, la mayoría hispanos, que viven en Estados Unidos.

Estas acciones se alistan justo el lunes cuando el presidente George W. Bush, pidió al Congreso desde la frontera con México en Arizona (sur) que le remita “un proyecto amplio” de reforma migratoria para firmar “este año”, lo cual fue rechazado por varias agrupaciones que sostienen que el mandatario “miente” en su plan migratorio como en su día lo hizo respecto a Irak.

Bush además mencionó una posibilidad para que los indocumentados obtengan la ciudadanía, si demuestran que tienen un empleo y cumplen un proceso que implicaría el pago de multas e impuestos atrasados.

“Pero todo esto no son más que planes con nombres nobles para un proyecto hipócrita de reforma que contempla un camino a la legalización de los indocumentados que es imposible de cumplir por parte de los trabajadores que ya están en Estados Unidos”, dijo a la AFP Nativo López, presidente del grupo proinmigrante MAPA (Hermandad Mexicana) en California, que cuenta con 150.000 miembros.

En la misma sintonía reaccionó el coordinador del grupo 10 de Abril, Juan Carlos Ruiz, para quien el presidente Bush “miente a la ciudadanía respecto a la reforma migratoria de la misma forma que lo hizo respecto a Irak”.

“Su plan es seguir asegurando con militares la frontera, deportando gente y desgarrando familias”, dijo a la AFP Ruiz, líder de esta coalición de más de 150 agrupaciones a nivel nacional que preparan para el martes “el día nacional de acción por la justicia para los inmigrantes”.

“April 10” llama para el martes a una jornada de firmas de un texto que “reclame una reforma justa” y que enviarán a los legisladores en Washington.

Pero recalcó su oposición “a los puntos que Bush omite en sus discursos” que causan “daño” como las redadas “contra sitios de trabajo” y que en muchos casos están separando a hijos menores de sus padres.

Para Nativo López, los proyectos de reforma migratoria de los partidos demócrata y republicano son “prácticamente iguales en injusticia”, y varias organizaciones con sede en California están llamando a marchas para protestar contra ellos y a un boicot el 1 de mayo, día del trabajador en el mundo pero no en Estados Unidos.

“Ya tuvimos una respuesta importante el sábado en Los Angeles”, comentó López, refiriéndose a una protesta que juntó hasta 10.000 personas -según la policía-, en el centro de esa ciudad el sábado pasado, cuando se manifestó a favor de una reforma parte de la gran comunidad hispana de California.

Según el Movimiento por una Reforma Justa (FIRM, por sus siglas en inglés) el discurso de Bush el lunes probó “una vez más” que “tanto él como su administración están al margen de los que realmente quiere el país”.

“El plan del presidente Bush es inviable y podría llevar a los inmigrantes a una situación aún más precaria. Estados Unidos necesita un sistema que respete las contribuciones que hecho los inmigrantes, quienes son y serán siempre parte de la fábrica de nuestra sociedad”, opinó FIRM en Washington.

Para esta agrupación “nunca va a ser ésta una nación de primera clase mientras existan ciudadanos de segunda categoría”, agregó llamando a que el martes se pida al Congreso una reforma “comprensiva”.

En Nueva York están previstos actos de diversa índole. El martes, la organización New York Inmigration Coalition (NYIC) ha pedido a sus simpatizantes que llamen a las oficinas del gobernador demócrata Eliot Spitzer y protesten por las trabas burocráticas que se imponen a los inmigrantes que quieren un permiso de conducir.

“Pensamos que es un asunto de sentido común y de justicia que los inmigrantes en el Estado tengan la posibilidad de conducir”, dijo el portavoz de la NYIC, Norman Eng, calificando de “ridículo” el argumento de que entregar licencias en general permitiría a supuestos terroristas tener un documento.


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