«El mercado hipotecario español no tiene nada que ver con el de Estados Unidos»

El vicepresidente Pedro Solbes, en una comparecencia pública en Moncloa.

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ENTREVISTA CON PEDRO SOLBES VICEPRESIDENTE Y MINISTRO DE ECONOMÍA

En medio de su descanso estival, el vicepresidente Pedro Solbes analiza el último año económico, salpicado por las opas en el sector eléctrico y la dimisión de Conthe.

El vicepresidente económico disfruta sus últimas vacaciones veraniegas previas a las elecciones generales sin reconocer si repetirá en el cargo en caso de victoria socialista. En plena convulsión de los mercados, Pedro Solbes descarta que los problemas derivados de la crisis de las hipotecas de alto riesgo de EE UU impacten en la economía española.

TEXTO: M.J. ALEGRE / J.A. BRAVO (COLPISA). FOTOS: ARCHIVO.

Asegura que, en la legislatura que termina -la de las opas y la dimisión de Conthe-, en política económica se ha hecho lo que ha dispuesto «salvo alguna decisión del presidente». Reconoce que no será fácil, pero se ve capaz de aprobar las cuentas de 2008, la gran tarea pendiente.
- La crisis de las hipotecas ha suscitado la desconfianza. ¿Está justificada la preocupación?

- El Ministerio de Economía, junto al Banco de España, está siguiendo con atención la evolución de los mercados financieros, y la volatilidad extrema nunca es bienvenida. Sin embargo, las dificultades actuales están teniendo lugar en un mercado, el estadounidense, y en un sector concreto, el de las hipotecas de alto riesgo.

- ¿Puede afectarnos la crisis?

- El mercado hipotecario español no tiene nada que ver con el de Estados Unidos y nuestros índices de dudosidad continúan en niveles históricamente bajos. Aunque es posible que haya entidades europeas que asumieron riesgos en el sector de las hipotecas «subprime», no nos consta que haya entidades españolas en esa situación.

- Queda poco para terminar la legislatura. ¿Seguirá de ministro si el PSOE repite victoria?

- Siempre he dicho que es un tema para plantear en su contexto, después de ganar las elecciones y de una petición del presidente. Una legislatura son cuatro años, y antes de tomar un compromiso de este tipo, a ciertas edades hay que reflexionarlo muy bien y ver las ventajas e inconvenientes.

- Si no continúa, ¿qué perfil de ministro de Economía propondría al presidente del Gobierno?

- Hablar de un perfil es muy difícil. Lo que me parece razonable es que cualquiera que se responsabilice de la política económica en un país de la zona euro debe tener una formación internacional, conocer los procedimientos europeos, ser coherente con las políticas fiscales y monetarias que se practican en Europa, y con las reformas de la agenda de Lisboa.

Las eléctricas y Conthe

- Hace tres años emitió una dura opinión sobre los consejeros de las empresas privatizadas. ¿Las ve ahora mejor?

- Hay de todo, pero no estoy seguro de que el modelo de privatización que se puso en marcha tomase como un elemento clave los riesgos de jugar en el mercado, y así lo hemos visto en algún sector.

- Piensa en las eléctricas, ¿no?

- Las decisiones que se toman en el sector eléctrico, en general, ni nos llevan a un camino de privatización con liberalización, como es el británico y su competencia abierta, ni nos dejan en un modelo sin privatización ni liberalización, caso del francés y sus reservas de derechos. Eso ha hecho que todos los ajustes del mercado español sean más complejos. Nos quedamos a mitad de camino, en una zona de nadie.

- Otra de las piedras en su zapato parece haber sido las relaciones con la oficina económica de Moncloa, véanse las opas sobre Endesa y la dimisión de Conthe.

- En las opas, tengo una especial sensibilidad con Europa y veía riesgos en algunas resoluciones que se han adoptado. Son elementos de protección que me chirrían, y ha sido la razón que nos ha llevado a enfoques distintos.

- ¿Y la polémica salida del presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores?

- La CNMV es un órgano que toma sus decisiones por mayoría, y en un momento, su presidente pierde una votación y adopta la decisión de marcharse. Había buenos argumentos por una y otra opción. Mi objeción es a la forma en que plantea esa dimisión, porque tiene un elemento de incoherencia. Entiendo que Conthe quisiera una Comisión más prestigiosa, pero la realidad es que generó tensiones que lo han hecho más complicado. Dicho esto, la institución está funcionando perfectamente.

- P.: ¿Hasta que punto la oficina económica del presidente del Gobierno ha complicado sus relaciones con Rodríguez Zapatero?

- Esa oficina tiene algunas funciones enormemente útiles, y ese papel lo ha jugado bien. Ha coordinado con buenos resultados el programa nacional de reformas y las políticas de I+D+i (investigación, desarrollo e innovación).

- ¿Y qué nos dice de las otras funciones, donde han tenido ustedes opiniones divergentes?

- Eso demuestra que no todos opinamos lo mismo. En temas de política económica, con alguna excepción, se ha hecho lo que he dicho. Y cuando hablo de alguna excepción, responde a decisiones personales del presidente.

- ¿Es la ayuda de 2.500 euros por hijo una de esas excepciones?

- (Ríe) Pasemos a otro tema.

- ¿Llegó a pensar en tirar la toalla antes de finalizar la legislatura?

- Tomé un compromiso por cuatro años y seré coherente con ello.

«Aprobar los presupuestos»

- Entremos en "harina" presupuestaria. Negociar con un superávit público del 1% del Producto Interior Bruto será más fácil, ¿no?

- Es verdad que tiramos de superávit, y que va por encima de la cifra prevista, pero también el crecimiento va mejor de lo estimado. Tenemos que ser igual de prudentes en el gasto y ahorrar para el futuro. A mí el superávit del 1,8% (del PIB) no me impresiona porque una parte muy importante pertenece a la Seguridad Social. En otros países con niveles de crecimiento parecidos, están teniendo superávit claramente mayores.

- No le impresionará, pero tener récord positivos consecutivos es un dulce. ¿Repetiremos este año?

- Las cifras nos dan por encima del resultado estimado, pero sabemos que ejecuciones y ajustes a fin de año arrojarán una cifra distinta. Creo que, con niveles de crecimiento económico parecidos y el impacto de la reforma fiscal, deberíamos tener una cifra ligeramente inferior a la del año pasado.

- Por el contrario, será más difícil sacar adelante las últimas cuentas públicas de la legislatura.

- Mi obligación es sacarlas adelante. El PNV ha mostrado una disposición favorable. El acuerdo sobre el Cupo vasco y otros temas parece reforzar esta posición. Los otros grupos no han mostrado una posición contraria. Tengo la sensación de que pasaremos el trámite de enmiendas a la totalidad. A partir de ahí, utilizaremos los márgenes para algún gasto a propuesta de otros grupos.

- ¿Podemos conocer las cifras de alguna partida específica?

- Los detalles se sabrán en septiembre. La inversión en I+D+i crecerá un 16% y duplicaremos el gasto en dependencia, hasta 890 millones de euros. En ayuda al desarrollo intentaremos llegar al 0,5% del PIB, y en las pensiones mantendremos nuestro compromiso de subir las mínimas.

Diario de Navarra-España/12/08/2007