2/9/07

El texto presidencial destaca avances en democracia y política exterior

El diputado Cristian Castaño recibe el primer Informe de Gobierno del presidente Felipe Calderón, ayer en el Palacio Legislativo de San Lázaro
José Carlo González
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Fenece la liturgia; Felipe Calderón se colocó la banda tricolor en Los Pinos
Se ha trazado el camino por el que se continuará para que sean motor para el bienestar de los mexicanos, sostiene
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CLAUDIA HERRERA BELTRÁN
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En el mensaje de un minuto que el presidente Felipe Calderón pronunció ante el Congreso de la Unión al entregar su primer Informe de gobierno, declaró ser respetuoso de los legisladores y estar en espera de la determinación que adopten para sostener un diálogo público y directo sobre la situación del país.
De igual forma, en el documento que no leyó ante senadores y diputados asegura que en nueve meses de gobierno “hay avances importantes” en democracia y política exterior, pero el principal es que se ha trazado el camino por el que se habrá de continuar para que sean el motor para el bienestar de los mexicanos. El propósito es consolidar una democracia de calidad, afirma.
Pone énfasis en el “heroísmo” de las fuerzas armadas por su participación en los operativos de seguridad. Señala que la división de poderes no es meramente un dogma constitucional, e indica que a fin de cuentas los ciudadanos serán quienes tendrán la última palabra al evaluar los resultados de su gobierno.
Durante su breve estancia en el Palacio Legislativo de San Lázaro el michoacano resaltó que cumplía con su deber constitucional de asistir a la apertura de las sesiones ordinarias del primer periodo del segundo año de la 60 Legislatura, y anunció que ya había instruido a su gabinete para que sus integrantes presenten informes ante los legisladores.
Entregó el libro y los anexos a su correligionario de partido, el panista Cristian Castaño, que en ese momento fungía como presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, una vez que la perredista Ruth Zavaleta se retiró junto con los integrantes de su partido en protesta.
El texto central consta de 392 páginas, que se dividen en una presentación y cinco capítulos: Estado de derecho y seguridadñ Economía competitiva y generadora de empleos; Igualdad de oportunidades; Sustentabilidad ambiental; Democracia efectiva, y Política exterior responsable.
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Democracia y nueva agenda diplomática
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Si bien el fefe del Ejecutivo federal ofrecerá un mensaje político hoy en Palacio Nacional, en las páginas del primer Informe se recogen algunos aspectos.
Advierte que el tránsito a la democracia que el país experimentó de manera gradual en las décadas recientes abrió posibilidades de justicia que hoy se tienen que hacer realidad. Los mexicanos, agrega, exigen una democracia efectiva en la que el voto se traduzca en gobiernos e instituciones capaces de dar respuesta a las preocupaciones cotidianas de la gente.
Insiste en que ha privilegiado el diálogo con los poderes de la Unión y que se ha propuesto impulsar reformas que contribuyan a la consolidación democrática, entre las que destacan las iniciativas en materias de seguridad, política y electoral, el fortalecimiento del federalismo y el pleno respeto de los derechos humanos.
También asegura que su gobierno ha planteado una “nueva agenda diplomática”, orientada a fortalecer la economía, defender los derechos de los mexicanos en el exterior y promover los intereses de México en el mundo. Esta agenda, explica, ha dado prioridad a la cooperación internacional y a la diversificación de las relaciones con países, organismos y foros internacionales, entre los que ha merecido especial atención el fortalecimiento de las relaciones con los “países hermanos de América Latina”.
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Seguridad
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En materia de seguridad y estado de derecho, sostiene que su gobierno ha dado los primeros pasos hacia una política integral y con visión de largo plazo, que tiene como propósito avanzar en la construcción de un país que transite firme por la vía de las libertades, de la seguridad pública, del orden y la paz social.
Justifica los operativos realizados de manera conjunta por los cuerpos policiacos y las fuerzas armadas como una medida para preservar el orden y la legalidad en zonas del territorio nacional que estaban amenazadas por la delincuencia.
Aunque reconoce que la certeza jurídica en el país, a pesar de los esfuerzos realizados en el pasado, ha derivado en ocasiones en un ejercicio discrecional del poder y ha generado desconfianza en la sociedad, este gobierno busca dejar atrás dichas situaciones mediante la aplicación de la ley.
El capítulo sobre economía y generación de empleos es el más largo y señala, entre otros puntos, que a pesar de la desaceleración económica experimentada en Estados Unidos y de la volatibilidad de los mercados financieros internacionales, la solidez de la economía ha permitido alcanzar resultados positivos en materia de inversión extranjera y empleo.
Justifica que si bien en el primer trimestre de 2007 la actividad económica redujo su ritmo de expansión, a partir del segundo empezó a mostrar “signos claros” de recuperación importante en la actividad productiva del país. En este rubro resalta la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) como estrategia para mantener la estabilidad económica.
En cuanto a la generación de empleos –que fue su principal oferta de campaña–, ofrece un balance positivo al señalar que de enero a julio se tenían registrados en total 14.5 millones de personas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo que representa un cifra superior en 539 mil 925 trabajadores respecto de diciembre de 2006.
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Persisten graves carencias
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Resalta que a pesar de los avances obtenidos en años recientes en materia de combate a la pobreza, prevalecen graves carencias en varias regiones del país. Sin embargo, asegura que se han dado pasos para ampliar y reforzar los programas sociales que han tenido impacto positivo, así como para generar nuevas políticas y planes encaminados a mejorar las condiciones de segmentos cada vez más amplios de la población.
Para cumplir los objetivos en materia social, refiere, es necesario alcanzar un mayor crecimiento económico que genere más oportunidades de empleo bien remunerado y facilite un mayor financiamiento de los programas sociales.
Afirma que se necesita invertir más recursos públicos en el bienestar y el progreso de la gente, y agrega que falta mucho por hacer por los que menos tienen, pero considera que se avanza por la ruta correcta.
La pobreza es el más grave problema de México y su superación el principal desafío, por lo que esta generación tiene la responsabilidad histórica de encontrar soluciones de fondo, agrega.
Acerca de la política educativa, explica que las prioridades son impulsar la calidad, reducir las desigualdades, promover las nuevas tecnologías, extender la cobertura y promover la equidad y la pertinencia de la enseñanza superior.
En el caso del seguro México para una Nueva Generación, uno de los programas predilectos del michoacano, señala que se han afiliado 388 mil 835 niños y que para alcanzar sus metas se planea, entre otras estrategias, comprar servicios de salud al IMSS, al ISSSTE y a hospitales privados.
Empeñado en presentarse como un presidente ambientalista, dedica un apartado al tema y sostiene que ya ha tomado acciones encaminadas para cuidar los recursos naturales y comenzar a revertir el daño ambiental, que ha llegado a niveles insostenibles.
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Antes de ir a San Lázaro conversó con comisionados
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Claudia Herrera Beltrán
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La liturgia de los informes presidenciales quedó atrás este primero de septiembre. Felipe Calderón no cumplió ayer con una serie de ritos que eran tradicionales, como el de acudir a Palacio Nacional para colocarse la banda tricolor.
Con las manifestaciones del PRD en el zócalo, Calderón, al igual que su antecesor Vicente Fox en su último Informe, prefirió ponerse la banda en la residencia oficial de Los Pinos y desde ahí salir al Palacio Legislativo de San Lázaro.
En el salón blanco de la casa presidencial recibió antes a la comisión de cortesía designada por el Congreso de la Unión, con quienes tuvo breve platica.
Ahí estuvieron los senadores del PAN José Julián Sacramento, Guillermo Paredes Elías y Mario López; del PRI, Rogelio Rueda, y del PVEM Manuel Velasco; así como los diputados panistas María de los Ángeles Jiménez y Francisco Javier Murillo, el priísta José Escajeda; el verde Alan Notholt, y Armando García, de Alternativa.
La lista se completó con dos diputados que acompañaron a Calderón en la gira que hizo por Centro y Sudamérica: Mónica Arriola, de Nueva Alianza e hija de la lideresa magisterial Elba Esther Gordillo, y el ex petista Félix Castellanos.
Lejos quedaron los tiempos en que el jefe del Ejecutivo, antes de acudir a San Lázaro, sonreía para las cámaras en compañía de su familia y respondía preguntas para una transmisión televisiva especial.
Ayer, el segundo presidente panista en la historia del país tuvo reuniones con su círculo cercano: Juan Camilo Mouriño, Maximiliano Cortázar, Alejandra Sota y César Nava, siguiendo las negociaciones que de última hora se daban entre diputados y senadores para definir su acceso a la tribuna del Congreso.
Sin embargo, Presidencia se adelantó a la ceremonia con los legisladores y desde las primeras horas del día colocó en su página de Internet un link especial sobre su Primer Informe de Gobierno. Ahí se podía leer la presentación del documento, apreciar fotografías de sus principales actos y posteriormente ver la señal en vivo de la transmisión del acto en San Lázaro.
El viejo ritual no se cumplió ni en los horarios, porque el mandataro salió de Los Pinos pasadas las cinco de la tarde con la banda puesta. Ni qué decir de otras prácticas del protocolo que se perdieron en otros sexenios. Carlos Salinas de Gortari fue el último que hizo el recorrido en automóvil descubierto desde Palacio Legislativo hasta Palacio Nacional.
Esta vez el presidente Calderón llegó y se retiró de San Lázaro en un vehículo cubierto, acompañado por su esposa Margarita Zavala, única integrante de la familia que estuvo presente.
Por lo menos ayer no hubo el tradicional besamanos en Palacio Nacional, aunque podrá darse este domingo, cuando Calderón encabece un acto en ese recinto y pronuncie el mensaje a la nación que no leyó en la Cámara de Diputados.
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La Jornada-México/02/09/2007

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