Expertos rusos refutan acusación de Georgia
Moscú (PL) la comisión de expertos rusos que investiga el incidente aéreo del pasado 6 de agosto en territorio georgiano consideró hoy que ningún avión de su país violó la frontera del estado limítrofe en Trascaucasia.
Una nota de prensa circulada al término de su misión en Tiflis añade que los resultados ponen en dudas las conclusiones del llamado grupo de expertos independientes, a las que califican de politizadas.
Según la información de los servicios de observación aérea, no ocurrió ninguna penetración ilegal en la soberanía de Georgia, reitera el texto entregado por la embajada de Rusia en la vecina nación.
Fuentes castrenses y diplomáticas de Tiflis acusaron a Moscú de violar el espacio aéreo y de lanzar un misil, que no explotó en la región de Gori, cerca de la zona de conflicto con Osetia del Sur.
Especialistas del ministerio de Defensa y de la Cancillería sostienen que genera desconcierto además la posición de expertos independientes (Estados Unidos, Suecia, Letonia y Lituania), cuyo comunicado final se parece más a una declaración política concertada.
Cuestionaron el hecho de que las pesquisas se apoyaron en información unilateral para luego realizar conclusiones generales.
El embajador especial de Rusia al frente de la delegación, Valeri Keniaikin, afirmó que el informe de la parte rusa echó por tierra la versión de Tiflis.
La prensa aquí refirió el clima de tensiones permanente durante la visita de la comisión a Tiflis, al punto que los canales televisivos georgianos prácticamente no informaron sobre la rueda de prensa en la embajada del país euroasiático.
De acuerdo con datos del control aéreo ruso, en la mencionada zona de responsabilidad se detectaron 90 aparatos, pero ninguno violó el espacio vecino, en tanto los radares georgianos registraron sólo una nave, subraya el informe.
El experto en armamento aéreo Pavel Akulenok dijo que le fue negada a la contraparte una revisión de los aviones caza SU-25 y que el hoyo donde supuestamente cayó el cohete resultó más bien allanado.
Denunció al mismo tiempo que los colegas georgianos destruyeron el segmento central de la cabeza del misil, donde lleva el número de serie, lo cual es incomprensible, acotó.
Sólo accedieron a una fotografía del cohete con un número de serie y a varios fragmentos, al parecer de un modelo Raduga X-58, pero con una gama de serias incongruencias, según el experto ruso./lam oda
Una nota de prensa circulada al término de su misión en Tiflis añade que los resultados ponen en dudas las conclusiones del llamado grupo de expertos independientes, a las que califican de politizadas.
Según la información de los servicios de observación aérea, no ocurrió ninguna penetración ilegal en la soberanía de Georgia, reitera el texto entregado por la embajada de Rusia en la vecina nación.
Fuentes castrenses y diplomáticas de Tiflis acusaron a Moscú de violar el espacio aéreo y de lanzar un misil, que no explotó en la región de Gori, cerca de la zona de conflicto con Osetia del Sur.
Especialistas del ministerio de Defensa y de la Cancillería sostienen que genera desconcierto además la posición de expertos independientes (Estados Unidos, Suecia, Letonia y Lituania), cuyo comunicado final se parece más a una declaración política concertada.
Cuestionaron el hecho de que las pesquisas se apoyaron en información unilateral para luego realizar conclusiones generales.
El embajador especial de Rusia al frente de la delegación, Valeri Keniaikin, afirmó que el informe de la parte rusa echó por tierra la versión de Tiflis.
La prensa aquí refirió el clima de tensiones permanente durante la visita de la comisión a Tiflis, al punto que los canales televisivos georgianos prácticamente no informaron sobre la rueda de prensa en la embajada del país euroasiático.
De acuerdo con datos del control aéreo ruso, en la mencionada zona de responsabilidad se detectaron 90 aparatos, pero ninguno violó el espacio vecino, en tanto los radares georgianos registraron sólo una nave, subraya el informe.
El experto en armamento aéreo Pavel Akulenok dijo que le fue negada a la contraparte una revisión de los aviones caza SU-25 y que el hoyo donde supuestamente cayó el cohete resultó más bien allanado.
Denunció al mismo tiempo que los colegas georgianos destruyeron el segmento central de la cabeza del misil, donde lleva el número de serie, lo cual es incomprensible, acotó.
Sólo accedieron a una fotografía del cohete con un número de serie y a varios fragmentos, al parecer de un modelo Raduga X-58, pero con una gama de serias incongruencias, según el experto ruso./lam oda
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Prensa Latina - Cuba/22/08/2007
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