Sarkozy relaja su postura sobre trabajadores ilegales
AFP
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El Gobierno ha fracasado en su programa de expulsar a los sin papeles
Koutoubo Gassama pasó una semana en un centro de detención en Estrasburgo en octubre del año pasado, esperando ser expulsado a Senegal como parte de la campaña del presidente francés Nicolas Sarkozy para combatir la inmigración ilegal. En su lugar, el cocinero de 27 años recibió permiso para quedarse en el país con una visa de trabajo temporal.
El Gobierno ha fracasado en su programa de expulsar a los sin papeles
Koutoubo Gassama pasó una semana en un centro de detención en Estrasburgo en octubre del año pasado, esperando ser expulsado a Senegal como parte de la campaña del presidente francés Nicolas Sarkozy para combatir la inmigración ilegal. En su lugar, el cocinero de 27 años recibió permiso para quedarse en el país con una visa de trabajo temporal.
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París.- Gassama, que trabaja en un hotel en un nevado centro de montaña al este de Francia, se benefició con una enmienda a la ley migratoria francesa que ahora está recibiendo poca publicidad aunque el año pasado estuvo en los titulares por proponer pruebas de ADN para los extranjeros que quieran unirse a sus familiares. Su caso podría indicar una relajación en la política migratoria de Sarkozy.
"Hay personas que necesitan contratar y otras que quieren ser contratadas", dijo Violaine Carrere, a cargo de asuntos laborales en Gisti, organización caritativa parisiense que da apoyo legal a los inmigrantes. "La meta es juntarlos, y hacerlo de manera silenciosa", explicó
La línea de ayuda de Gisti ha recibido numerosas llamadas de patrones que solicitan información sobre la enmienda, que da a los prefectos regionales el derecho a otorgar visas de trabajo temporales a extranjeros sin papeles que laboran en Francia de manera ilegal, dijo.
La nueva medida, que aplica a personas de fuera de la Unión Europea, no se asemeja a la legalización masiva de trabajadores clandestinos que se dio en Italia en 2003 y en España en el 2005. En su lugar, se centra en mantener a un número limitado de personas en empleos considerados importantes para la economía local, conforme a lo establecido por listas elaboradas como parte de la política migratoria general.Firmeza y humanidad
El proceso "depende del caso, es moderado y progresivo", dijo Frederic Lefebvre, legislador del partido UMP de Sarkozy que redactó la enmienda. Calcula que aplicará a unos cientos de personas por región.
"``El objetivo es tener tanto firmeza como humanidad", dijo Lefebvre. La enmienda fue acogida después de que la indignación por las pruebas de ADN "caricaturizó la ley de Hortefeux'', dijo, refiriéndose al ministro de Inmigración Brice Hortefeux.
Sarkozy, de 52 años, le quitó votos al partido de Jean-Marie Le Pen que se opone a la inmigración en las elecciones presidenciales del año pasado al pedir expulsiones sistemáticas de inmigrantes ilegales y una política más selectiva para otorgar visas basada en las aptitudes en lugar de los vínculos de familia.
"La gente no entra a Francia sin autorización, y cuando lo hacen son escoltados de vuelta a su país", dijo Sarkozy.Línea flexible
Su disposición a flexibilizar la línea llega dos años después de violentos disturbios en los suburbios en donde viven muchos de los 5 millones de inmigrantes del país. En 2007, el Gobierno no alcanzó por segundo año la meta de expulsar a 25.000 de los cerca de 400.000 ilegales.
En campaña, Sarkozy prometió integrar a las minorías y propuso una "discriminación positiva" para los jóvenes de vecindarios pobres, aunque se han presentado pocas políticas específicas al respecto. Dijo que 50% de las visas emitidas a inmigrantes deberían cubrir empleos necesarios en cinco años, en comparación con 7% en 2006, al tiempo que se dificulta la entrada de familiares.
"¿Qué jefe de Estado se ha mantenido firme sobre su política migratoria?", dijo Riva Kastoryano, del Centro Internacional de Estudios e Investigación.
Los inmigrantes ilegales todavía corren el riesgo de expulsión si buscan regularizar su situación migratoria, y luego no se desempeñan en lo que es considerado uno de los empleos más necesarios en la región ni obtienen el respaldo del prefecto, señaló Carrere, de Gitsi.
Además, dijo Carrere, las listas de empleos prioritarios con frecuencia piden habilidades como conocimientos de computación para los ciudadanos que no pertenecen a la UE, mientras que los inmigrantes de los nuevos estados miembros de la UE pueden conseguir la visa con aptitudes menores, como cocina o reparación de techos.
París.- Gassama, que trabaja en un hotel en un nevado centro de montaña al este de Francia, se benefició con una enmienda a la ley migratoria francesa que ahora está recibiendo poca publicidad aunque el año pasado estuvo en los titulares por proponer pruebas de ADN para los extranjeros que quieran unirse a sus familiares. Su caso podría indicar una relajación en la política migratoria de Sarkozy.
"Hay personas que necesitan contratar y otras que quieren ser contratadas", dijo Violaine Carrere, a cargo de asuntos laborales en Gisti, organización caritativa parisiense que da apoyo legal a los inmigrantes. "La meta es juntarlos, y hacerlo de manera silenciosa", explicó
La línea de ayuda de Gisti ha recibido numerosas llamadas de patrones que solicitan información sobre la enmienda, que da a los prefectos regionales el derecho a otorgar visas de trabajo temporales a extranjeros sin papeles que laboran en Francia de manera ilegal, dijo.
La nueva medida, que aplica a personas de fuera de la Unión Europea, no se asemeja a la legalización masiva de trabajadores clandestinos que se dio en Italia en 2003 y en España en el 2005. En su lugar, se centra en mantener a un número limitado de personas en empleos considerados importantes para la economía local, conforme a lo establecido por listas elaboradas como parte de la política migratoria general.Firmeza y humanidad
El proceso "depende del caso, es moderado y progresivo", dijo Frederic Lefebvre, legislador del partido UMP de Sarkozy que redactó la enmienda. Calcula que aplicará a unos cientos de personas por región.
"``El objetivo es tener tanto firmeza como humanidad", dijo Lefebvre. La enmienda fue acogida después de que la indignación por las pruebas de ADN "caricaturizó la ley de Hortefeux'', dijo, refiriéndose al ministro de Inmigración Brice Hortefeux.
Sarkozy, de 52 años, le quitó votos al partido de Jean-Marie Le Pen que se opone a la inmigración en las elecciones presidenciales del año pasado al pedir expulsiones sistemáticas de inmigrantes ilegales y una política más selectiva para otorgar visas basada en las aptitudes en lugar de los vínculos de familia.
"La gente no entra a Francia sin autorización, y cuando lo hacen son escoltados de vuelta a su país", dijo Sarkozy.Línea flexible
Su disposición a flexibilizar la línea llega dos años después de violentos disturbios en los suburbios en donde viven muchos de los 5 millones de inmigrantes del país. En 2007, el Gobierno no alcanzó por segundo año la meta de expulsar a 25.000 de los cerca de 400.000 ilegales.
En campaña, Sarkozy prometió integrar a las minorías y propuso una "discriminación positiva" para los jóvenes de vecindarios pobres, aunque se han presentado pocas políticas específicas al respecto. Dijo que 50% de las visas emitidas a inmigrantes deberían cubrir empleos necesarios en cinco años, en comparación con 7% en 2006, al tiempo que se dificulta la entrada de familiares.
"¿Qué jefe de Estado se ha mantenido firme sobre su política migratoria?", dijo Riva Kastoryano, del Centro Internacional de Estudios e Investigación.
Los inmigrantes ilegales todavía corren el riesgo de expulsión si buscan regularizar su situación migratoria, y luego no se desempeñan en lo que es considerado uno de los empleos más necesarios en la región ni obtienen el respaldo del prefecto, señaló Carrere, de Gitsi.
Además, dijo Carrere, las listas de empleos prioritarios con frecuencia piden habilidades como conocimientos de computación para los ciudadanos que no pertenecen a la UE, mientras que los inmigrantes de los nuevos estados miembros de la UE pueden conseguir la visa con aptitudes menores, como cocina o reparación de techos.
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El Universal - Venezuela/22/01/2008
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