Experto vaticina nuevas confrontaciones ruso-norteamericanas
Moscú-El director del Instituto de Estados Unidos y Canadá de la Academia de Ciencias de Rusia, Serguei Rogov, pronosticó hoy una seria crisis en las relaciones entre Moscú y Washington, en los próximos años.
Rogov consideró que persisten serias discrepancias en la esfera política, económica, así como en aspectos militares, lo que hace pensar en un escenario adverso para los vínculos ruso-norteamericanos.
Al intervenir en un plenario de la Academia de Ciencias, el especialista dijo que factores de carácter interno agudizarán esta situación, al punto de no contribuir a zanjar las diferencias.
El experto advirtió en ese sentido que no descarta un reinicio de la guerra fría entre Rusia y Estados Unidos si las partes no son capaces de revertir a tiempo ese escenario.
Una nueva guerra fría sería posible, acentuó, desde la concepción de un modelo de relaciones bilaterales (ruso-estadounidenses) en las que predominen las tendencias de confrontación.
En opinión del académico ruso, cesó la competencia global desde el punto de vista político, pero se ha explayado una severa concurrencia en el llamado espacio postsoviético.
La distancia de enfoques entre el Kremlin y la Casa Blanca es ostensible en un conjunto de problemas de actualidad internacional como Kosovo, Irán, Iraq, el conflicto israelo-palestino y la ampliación de la OTAN, vista por Moscú como una amenaza.
En la agenda armamentista Rusia tampoco encuentra un diálogo de paridad, conflicto éste que pone en dudas el futuro de varios acuerdos bilaterales para el control de los armamentos estratégicos y la seguridad global, precisó el experto.
De mantenerse esta tendencia, Rogov da como posible un resurgimiento de una espiral belicista sin límites en los armamentos nucleares y convencionales, aunque aclaró que ambos fenómenos son evitables.
Preguntado sobre el tema durante su reciente visita a los Emiratos Arabes Unidos, el presidente ruso, Vladimir Putin, admitió discrepancias en una serie de asuntos de la agenda internacional, pero llamó a no cargar las armas y evitar la confrontación.
Rogov consideró que persisten serias discrepancias en la esfera política, económica, así como en aspectos militares, lo que hace pensar en un escenario adverso para los vínculos ruso-norteamericanos.
Al intervenir en un plenario de la Academia de Ciencias, el especialista dijo que factores de carácter interno agudizarán esta situación, al punto de no contribuir a zanjar las diferencias.
El experto advirtió en ese sentido que no descarta un reinicio de la guerra fría entre Rusia y Estados Unidos si las partes no son capaces de revertir a tiempo ese escenario.
Una nueva guerra fría sería posible, acentuó, desde la concepción de un modelo de relaciones bilaterales (ruso-estadounidenses) en las que predominen las tendencias de confrontación.
En opinión del académico ruso, cesó la competencia global desde el punto de vista político, pero se ha explayado una severa concurrencia en el llamado espacio postsoviético.
La distancia de enfoques entre el Kremlin y la Casa Blanca es ostensible en un conjunto de problemas de actualidad internacional como Kosovo, Irán, Iraq, el conflicto israelo-palestino y la ampliación de la OTAN, vista por Moscú como una amenaza.
En la agenda armamentista Rusia tampoco encuentra un diálogo de paridad, conflicto éste que pone en dudas el futuro de varios acuerdos bilaterales para el control de los armamentos estratégicos y la seguridad global, precisó el experto.
De mantenerse esta tendencia, Rogov da como posible un resurgimiento de una espiral belicista sin límites en los armamentos nucleares y convencionales, aunque aclaró que ambos fenómenos son evitables.
Preguntado sobre el tema durante su reciente visita a los Emiratos Arabes Unidos, el presidente ruso, Vladimir Putin, admitió discrepancias en una serie de asuntos de la agenda internacional, pero llamó a no cargar las armas y evitar la confrontación.
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Prensa Latina - Cuba/12/09/2007
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